Cuando pensamos en Lovaina y en los edificios que la caracterizan lo primero que viene a la mente es el antiguo ayuntamiento o Stadhuis, erigiéndose en Grote Markt, en pleno centro de la ciudad. Para hablaros más de este edificio tan impresionante, primero os pondré en el contexto de principios del siglo XV. La Universidad Católica de Lovaina se acababa de fundar, se estaba construyendo la iglesia de San Pedro y también Grote Markt donde antes estaba el cementerio de la iglesia. Como veréis, esa fue una época muy prolífera para la ciudad. En ese momento de la historia, las ciudades flamencas “competían” por ver quien tenía los edificios más impresionantes. Por eso, tras la construcción del ayuntamiento de Bruselas, Lovaina no podía quedarse atrás. De esta manera, en 1439 se colocaba la primera piedra del nuevo ayuntamiento de Lovaina. La construcción dura 30 años y la dirigirían tres arquitectos, Sulpitius van Vorst quien fallece ya en 1439, Jan II Keldermans hasta 1445 y, a partir de 1448, el joven Matthijs de Layens. Este último llevó a cabo la afamada casa delantera, el ala con sus seis torres octogonales y caladas y con la entrada en el centro. Esta fachada tan ricamente ornamentada que sigue un estilo gótico florido, más concretamente brabantino, absorbe toda la atención. Pero el ayuntamiento ocupa todo el bloque entre Grote Markt y las calles Naamsestraat, Muntstraat y Broekhandelsstraat. Tiene incluso un patio: Vrijthof.
Antes de la incorporación del tercer arquitecto De Layens, se había planeado una gran torre de campanario en la esquina con Naamsestraat, tomando la torre del ayuntamiento de Bruselas como modelo. Finalmente, no se realizó y como compensación, a la casa delantera se le añadió un tercer piso.
El ayuntamiento ha sufrido cambios como la adición de las escaleras barrocas situadas frente al ayuntamiento, que datan del 1709. En esa fecha se hizo también un segundo vano. En el dintel de la puerta más antigua está la estatua de San Pedro, el patrón de Lovaina.
Un dato curioso es que el ayuntamiento consiguió escapar al gran incendio que ocurrió en la ciudad de Lovaina durante la Primera Guerra Mundial. Allí se ubicó la Kommandantur alemana. A finales de la Segunda Guerra Mundial una bomba rozó la fachada durante un bombardeo de los aliados.
La fachada como hoy la conocemos fue fruto de una moda del siglo XIX. Anteriormente, sin embargo, el ayuntamiento carecía de las 236 estatuas que hoy llaman tanto la atención. Antes de 1850 ya estaban las hornacinas para las estatuas entre las ventanas y en las torres de las esquinas junto con su correspondiente coronamiento de baldaquinos y pináculos y con los pedestales labrados. En éstos, sin embargo, sí que hubo desde un primer momento representaciones de relatos bíblicos. El pintor municipal los pintaba tras las distintas sugerencias de los teólogos. Estas figuras servían de advertencia para los transeúntes y usuarios del ayuntamiento ya que representaban relatos sobre el pecado y el castigo. Sin embargo, el cambio importante fue como ya he mencionado, en 1850 cuando Bélgica y otros países viven la moda por las estatuas: las personalidades nacionales eran colocadas en lugares públicos para darle identidad al país. La iniciativa en Lovaina parte del rey Leopoldo I. Veinte escultores trabajaron en las 236 estatuas del ayuntamiento de Lovaina desde 1850 hasta principios del siglo XX. En la planta baja encontramos figuras de artistas, eruditos y personajes históricos que vivieron en Lovaina. En el primer piso están los patrones de las parroquias de Lovaina y hombres que simbolizan la libertad e independencia municipal como alcaldes, concejales, etc. En la segunda planta encontramos los condes de Lovaina y los duques de Brabante; y por último en las torres hay principalmente figuras bíblicas.
El interior del ayuntamiento se puede visitar todos los días, excepto los que hay pleno, a las 15h, habiendo comprado previamente una entrada en la oficina de turismo en la misma calle Naamsestraat o con la tarjeta ILUVLEUVEN.
Os animo a que un día, en vez de pasar de largo, dediquéis un rato a observar la maravillosa obra de arquitectura junto con sus más de 200 estatuas. ¡No os defraudará!
Soy Marina, la nueva corresponsal Erasmus en Lovaina. Estudio arquitectura en la Universidad Politécnica de Madrid y cursaré cuarto en la KU Leuven. Hace apenas unos días que he llegado a la que será mi nueva casa durante este curso, y todavía no me lo creo. Tengo la sensación de que he venido aquí de viaje y que en unos días me toca volver a Madrid. ¡Pero no! Ahora empieza la aventura de acomodarse a esta nueva ciudad la cual seguro me sorprenderá a lo largo del año. Elegí Lovaina por varias razones, entre ellas el prestigio de su universidad y evidentemente su ambiente universitario.
Todo estudiante quiere ir a un sitio donde además de estudiar también lo vaya a pasar bien, las cosas como son. Además considero que Lovaina, y todo Bélgica, tiene una amplia oferta cultural que hará que cada día aprenda algo nuevo. Poco a poco iréis descubriendo conmigo cosas interesantes y útiles de esta ciudad, aparte de daros consejos a los futuros Erasmus. De momento todo lo que os puedo decir es que traigáis chubasquero y ¡muchas ganas de disfrutar!