Jette es una de las diecinueve comunas que conforman la región de Bruselas. Es uno de los más alejados del centro, delimitando al noroeste. Tiene una población de unos 43.000 habitantes y un área total de cinco kilómetros.
La Vrije Unversiteit Brussel, la universidad flmaenca de la ciudad, tiene su facultad de medicina y hospital en Jette -el resto de campus se reparten entre Ixelles y Etterbeek-, por lo que muchos estudiantes deciden alojarse en la comuna, con precios ligeramente más bajos que en las comunas centrales. Respecto a su origen, en la zona se han encontrado herramientas del neolítico y restos de un ciudad galo-romana, si bien las obras más antiguas que aún se mantienen datan del territorio feudal de los Duques de Brabante durante la Edad Media. Bajo su ducado, la Abadía de Dieleghem fue fundada en 1095: los siguientes siete siglos poseyó la mitad de la riqueza de la comuna. Del XVII al XX Jette se convirtió en condado; más tarde, con las desamortizaciones de la Revolución Francesa, los abades fueron expulsados del condado y la mayoría de edificios eclesiásticos se destruyeron. Hoy en día solo queda en pie la mansión del abad, reconvertido en museo de Historia.
Jette, pese a no ser una de las comunas más sonadas, tiene mucho que ofrecer. El Ayuntamiento está considerado la obra maestra de Jules Van Ysendyck y la multiculturalidad de la zona añade valor a la oferta de ocio. Su habitante más famoso, el autor surrealista René Magritte, vivió en la comuna durante más de treinta años con Georgette, su esposa; su casa es ahora un museo dedicado a la pareja. En las habitaciones, que se mantienen con el mobiliario y la disposición que en los cincuenta, se pueden encontrar copias y reproducciones de la sobras de Magritte, muchas de ellas perdidas o destruidas durante la II Guerra Mundial. Las guías, además, son especialistas en la vida del autor y el movimiento surrealista. Un punto final para homenajear a Magritte, al que en 2017 le dedicaron varias exposiciones -en recuerdo a su legado, cincuenta años después su muerte- que se mantendrán hasta verano de este año.