Gante, al igual que otras ciudades belgas, es una ciudad medieval. En su origen, como ya conté en algún post anterior, la ciudad fue hecha por los romanos pero ya no queda absolutamente nada de la Gante románica. Se sabe que fue así porque la ciudad efectivamente aparece en los mapas románicos. Desgraciadamente todo fue quemado y devastado en el siglo IX por una visita que los ganteses tuvieron de aquellos pobladores de Escandinavia. Debido a esta desafortunada visita los ganteses decidieron construir una muralla para protegerse, y es por ello que podemos observar en el centro de la ciudad muchos edificios inusualmente pegados los unos a los otros, y lo que es más evidente, muchas iglesias muy cercanas.
Pues bien, el primero de los elementos medievales de la ciudad del que debemos hablar y que es probablemente el más evidente…son 3. Las llamadas 3 torres de Gante. En un post anterior hablé de una de ellas, la catedral. Pero, ¿y las otras 2? Se trata de las torres de Belfort y San Nicolás.
La torre de Belfort (“bel” quiere decir “campana” y “fort” “fortaleza”), es la torre desde donde se vigilaba que no vinieran enemigos a Flandes, y sobre todo gracias a lo llano que es Flandes estos posibles enemigos se podían ver a millas. Pero no solo eso, esta torre también era una especie de Instagram de la época que servía para organizar un poco la vida en la ciudad. Las 12 campanas de la torre tocaban melodías distintas que tenían diferentes significados: una visita importante, una reunión, un posible ataque… Y aún más, estas melodías podían estar acompañadas de izadas de banderas de diferentes colores que también anunciaban eventos, peligros y todo tipo de noticas para el pueblo.
La Edad de Oro de Gante fue el siglo XIII, siglo en el que la ciudad se rebeló por primera vez contra sus nobles. Los señores feudales, cansados de que los comerciantes, gracias a su creciente negocio, se enriquecieran cada vez más, comenzaron por aumentar los impuestos a éstos, les prohibieron incluso algunos de sus derechos y hasta mandaron controlar parte de su negocio, situación que les permitía tener poder de decisión sobre el mismo. Así pues, la burguesía terminó por alzarse contra los señores y ganaron. De esta forma exigieron sus derechos, en concreto 3: derechos comerciales, derecho a opinar libremente sobre los asuntos del comercio y derecho de reunión. Y estos derechos se guardaban como un tesoro debajo de esta torre, en un cofre que se abría con 6 llaves doradas, una por cada gremio, que controlaban así la legislación de la ciudad belga.
Es por esto que el símbolo de Gante es una soga. Y también por eso las fiestas de julio de Gante se inauguran con una marcha del silencio de cientos de hombre con estas sogas al cuello que caminan hacia la catedral. ¿Pero por qué una soga como símbolo de los ganteses? La ciudad ha vivido, como habéis podido leer, una gran cantidad de rebeliones que verdaderamente han acabado por marcar el espíritu de esta urbe.
Pero si hay algo que llama la atención de la torre es el dragón dorado que tiene en la punta superior. Se trata de un dragón robado por los ganteses a la gente de Brujas, que a su vez lo habían robado durante las cruzadas a Constantinopla, donde había sido hecho. Y es que entre Gante y Brujas, como dije en el pasado post, siempre ha sido todo cuestión de rivalidad. Más de 10 batallas hubo entre estas 2 ciudades durante el siglo XIV para tratar de controlar el comercio. La mayoría ganadas por Brujas, pero una de ellas, en la que los ganteses jugaron algo sucio, consiguieron llevarse este dragón como recuerdo de sus escasas victorias contra la ciudad vecina.
Actualmente se trata de un mirador y un museo cuya visita, hasta las 18.00 cuesta unos 8 euros y permite una magnífica vista de Gante.
La tercera de estas torres es la iglesia gótica de San Nicolás. Fue construida en piedra azulada proveniente de Tournai y de ella destaca la gran torre que se alza en el punto en el que se cruzan la nave principal y las laterales. Esta es la forma que tiene la iglesia de iluminarse por completo, actuando como el principal punto de luz hacia el interior.
Otro de los elementos del Gante medieval que merece ser mencionado es el castillo de los Condes. Oficialmente Gante siempre dependió de Francia por lo que nunca hubo un rey, pero sí condes. En ese momento, Felipe de Alsacia se enamora de un castillo en Damasco durante una cruzada que ordena que sea construido igual en Gante, lo cual supuso que las condiciones del castillo, dado el clima de Flandes, fueran extremadamente frías. Por eso terminaron construyendo otro castillo, que actualmente ya no existe, 300 metros más alejado, y el que era una copia de Damasco acabó por convertirse en una prisión.
Por último, existe un barrio auténticamente medieval en Gante, llamado Patershol, por el vale la pena perderse en el laberinto de calles que lo conforman. Además, una de las calles que rodea este barrio se ha convertido en una de las más conocidas gastronómicamente hablando, pues en ella podemos encontrar restaurantes de comida de todas las nacionalidades que se nos puedan ocurrir.
Y esto es todo sobre el Gante medieval. Nos vemos en el especial del próximo mes descubriendo más sobre esta preciosa ciudad.
¡Nos leemos!
¡¡Hola erasmus pasados, presentes y futuros!! Mi nombre es Victoria y como ya sabéis voy a ser vuestra corresponsal erasmus en Gante este primer semestre del curso 2019-2020. Nacida y criada en Valencia, la ciudad de las flores, la luz y el color, y donde estudio arquitectura, este año tendré el placer de cursar mi 4º curso en la KU Leuven de la magnífica y preciosa ciudad de Gante. Estoy convencida de que desde mi perspectiva os voy a poder mostrar lo mejor que esconde esta maravillosa ciudad del corazón de Europa.
Espero que podáis seguir mi experiencia con la misma ilusión que yo y que os anime a vivirla personalmente en el futuro. Al fin y al cabo, vamos a descubrir juntos lo que esconde esta flamante región europea así que lo viviréis en vivo y en directo. Habrá posts nuevos todas las semanas donde podréis leer acerca de mi estancia en Gante (cómo es vivir en Gante, qué visitar, dónde comer, cómo prepararos para afrontar esta aventura, y muuuuchas cosas más). ¡¡Así que os animo a que estéis muy atentos al blog!!