¡Hola a todxs y feliz martes! Espero que haya ido bien este comienzo de semana. Por mi parte, hoy vengo a hablaros sobre uno de mis productos favoritos del mundo, y creo que no soy la única que lo piensa, pero… ¿de qué hablo? Pues sí amigos, efectivamente, de la cerveza. Para todos los que habéis elegido Bélgica como vuestro próximo destino Erasmus, o ya habéis vivido la experiencia o simplemente la estáis viviendo, creo que existe un consenso por parte de todos, de que Bélgica es el país de la cerveza. Ya que puedes encontrar nada más y nada menos que 1500 marcas de cervezas y hasta unos 700 perfiles de sabor diferentes.
De hecho, creo que hay bastantes temas que poder abarcar si de cerveza se trata. Pero hoy, quiero hablaros de algunas marcas que no pasan para nada desapercibidas y son las que más consumo, ya que la podéis encontrar en cualquier supermercado al que vayáis y cuyo precio del botellín no es superior a 2 euros.
DUVEL:
La cerveza Duvel recibió su curioso nombre, tras una cata de presentación que realizaron en 1923, los cerveceros con las personalidades locales belgas. Según cuenta la historia de la cervecera, el señor Van De Wouwer, zapatero local, quedó tan impresionado por los potentes aromas de la cerveza tras probarla, que exclamó en flamenco: “Nen echten Duvel” (esto es un verdadero demonio).
Duvel, considerada todo un referente por los amantes de la cervezas Lager de mayor cuerpo, está fabricada desde principios del siglo XX, por la cervecera belga Duvel Moortgat.
Si hay algo que caracteriza plenamente a la cerveza Duvel, es su aroma intenso con un ligero toque a pomelo y cítricos, que no pasa desapercibido (sin lugar a duda, es mi favorita).
LEFFE:
Se trata de una marca de cerveza belga de la ciudad de Dinant, creada en 1240 por los cánones de la Orden de Canónigos Premonstratenses de la Abadía de Nuestra Señora de Leffe y producida por la cervecería Artois en Leuven. Hay varias cervezas en la gama, y se comercializan como cervezas de abadía. Se elaboran en grandes cantidades y se distribuyen ampliamente.
STELLA ARTOIS:
La historia de Stella Artois comienza en 1366, de cuando datan los registros de los impuestos existentes en la cervecera de Lovaina, una fábrica de cerveza que se encuentra todavía en existencia. En 1708, Sebastián Artois se convirtió en el maestro cervecero en Den Horen, y dio su nombre a la cervecería en 1717. En 1926, Stella Artois se lanzó inicialmente como una cerveza de temporada, especialmente para el mercado de las vacaciones de Navidad (Originariamente se creó como una cerveza de Navidad, de ahí su nombre que en latín quiere decir Estrella de Belén). El actual paquete de diseño y forma de botella fue creado en 1988 por el difunto David Taylor, fundador de Taylorbrands. Inspirado por el original de la etiqueta de la botella. El diseño incorpora la bocina símbolo de la cervecería Den Horen y la fecha 1366 de la primera cerveza registrada en Lovaina.
TRIPEL KARMELIET:
Proviene del flamenco «Triple Carmelita», es una cerveza rubia belga de alta fermentación. Elaborada desde 1996 por Brouwerij Bosteels en Buggenhout, Bélgica. Utiliza tres cereales: trigo, avena y cebada. Esta cerveza se elabora siguiendo supuestamente una receta auténtica de cerveza de 1679 derivada del antiguo convento de las carmelitas de Dendermonde. La idea de la elaboración de una cerveza que combinara los tres cereales, provenía de la existencia de panes multicereal, más nutritivos y sabrosos, que los habituales panes más comunes.
WESTMALLE:
Se trata de un tipo de cerveza trapense producida en la Cervecería Westmalle dentro de los muros de la Abadía de Westmalle, Bélgica. Produce tres cervezas, que llevan el sello de «Auténtico producto trapista» por la Asociación Internacional Trapense.
DELIRIUM TREMENS:
Es una marca de cerveza belga pale de triple fermentación producida por la cervecería Huyghe en Melle, provincia de Flandes Oriental.
Fue introducida en el mercado en 1989 y nombrada «Mejor cerveza del mundo» en 1998 en el Certamen Mundial de Cerveza de Chicago. Es fácilmente reconocible por su elefante rosa como logotipo y el aspecto de cerámica de su botella.
CHIMAY:
Las cervezas Chimay son auténticas cervezas trapenses: esto significa que se elaboran entre las paredes de un monasterio trapense, bajo el control y la responsabilidad de la comunidad monástica, que está implicada en el proceso íntegro de explotación de la cerveza. Esta, se produce en una cervecería localizada en el municipio de Chimay dentro de la Abadía de Scourmont, al sur de la provincia de Hainaut, Bélgica.
Estas son algunas de mis favoritas, aunque tampoco olvidar la St Bernardus Abt 12, la Trappistes Rochefort o Hapkin. Simplemente os he dejado algunos de las 1500 marcas con las que nos podemos encontrar en Bélgica. Espero que os haya gustado este post y os animéis a probar otro tipo de cervezas, saliendo un poco de la zona de confort.
¡Nos vemos en el próximo post! 😊
Tengo 21 años y soy de Cádiz, lugar del que estoy totalmente enamorada. Quien me conoce sabe lo mucho que me gusta hablar y presumir de mi ciudad; allí, estudio Derecho y Criminología y Seguridad en la Universidad de Cádiz y este año estoy haciendo mi cuarto curso en la KU Leuven, concretamente el “Máster of Criminology”.
Me encanta leer y sobre todo escribir, cualquier cosa, lo primero que se me pasa por la cabeza o a veces cosas más elaboradas, me considero una persona bastante feliz y optimista, que le gusta ver el lado bueno de las cosas, así que vengo a aportar un poquito de mí al blog.