Desde 1830 las marionetas cobran vida en un bar como probablemente ningún otro que hayas visitado antes. Si eres de los que se atreven con lo desconocido y fuera de lo común en sus viajes y paseos, Bruselas tiene una sorpresa más para ti.
En el número 66 de la Rue du Marché aux Herbes se encuentra la taberna fundada por una dinastía popular y adoptiva de titiriteros. La única que se conserva aún en activo después de que en el siglo XIX hubiera un total de 50. Aunque no siempre estuvo en el mismo lugar, pues en un principio las marionetas fueron acogidas en el Barrio de Marolles por el primer Toone, cuando debido a una medida tomada por el rey Felipe II, los cómicos empezaron a ser sustituidos por marionetas. No solo formaban parte de esta dinastía aquellos que compartían sangre, sino también quienes se consideraban merecedores de este título.
¿Y por qué Toone? Pues resulta que en Bruselas se utiliza como diminutivo de Antoine, el primer titiritero de este teatro. Desde Toone I hasta Toone VIII, son un total de 1400 las marionetas con las que cuentan hoy en día. Unas marionetas tradicionales Sicilianas que pesan alrededor de 8 kilos cada una, todas hechas a mano, incluidos sus vestuarios.
El repertorio de las actuaciones es muy variado: Romeo y Julieta, El Cid, La pasión de Cristo, Hamlet, MacBeth o Drácula. Pero también presenta otras muchas obras de la tradición teatral belga muy curiosas de presenciar y descubrir. En total unas 200 obras, que pueden ser representadas en neerlandés, inglés, alemán, italiano y español.
Además del teatro de marionetas, considerado como uno de los más antiguos del mundo, también cuenta con un taller de confección de marionetas, un museo en el que se realizan visitas guiadas, y por supuesto, un bar en el que disfrutar de una variada carta de cervezas belgas en un ambiente cubierto de decoración en relación al mundo de las marionetas.
En su página web, disponible en español, podréis reservar las entradas para acudir a cualquiera de sus obras una vez aparezcan de nuevo en su calendario. Además, podréis ver algunos vídeos de presentación como adelanto a las obras que realizan y conocer mucho más de la centenaria historia de esta taberna tan peculiar.
Mi nombre es Fuensanta y durante los próximos meses tendré el placer de compartir mi estancia en Bruselas. Aunque llegara en septiembre, os adelanto que, a pesar de estar cinco meses aquí puedo asegurar una cosa: ¡aún queda mucho por ver! Revelaros todos y cada uno de los secretos y sorpresas que esconde la ciudad será el objetivo principal de cada publicación. Descubriremos historia, leyendas, arte, ocio, música y todo lo que un futuro estudiante erasmus necesite conocer antes de empezar esta gran experiencia.