Hay veces que los dúos son simplemente sinónimo de éxito. Las patatas con salsa tienen otra alegría, los días de lluvia sientan mejor con una taza de té, y los macarrones con queso fundido son combos que la vida nos regala de vez en cuando porque sí, porque ese día tenemos mejor karma.
No se trata de cosas que obligatoriamente tengan que ir juntas, sino más bien de unidades que en nuestra mente encajan muy bien con otras. No tenemos que combinar siempre el beige con el esmeralda, pero sabemos que juntarlos es una apuesta segura. Pues bien, igual que Mortadelo y Filemón o Tintín y Milú, Bruselas también tiene a ese caballo ganador.
¡Y este se come!
Estoy hablando de la mitraillette y de la gallete, los mejores amigos de los estudiantes de Bruselas (y muy probablemente de los adultos que ya estén trabajando, aunque no quieran reconocerlo). Estas dos delicias en forma de bocadillo y wrap respectivamente, son dos comidas exclusivamente típicas de Bruselas y que se pueden encontrar en diferentes locales para llevar a domicilio por toda la ciudad.
Como racionar las cosas es de sabios y cada una de estas delicias merece dos posts por separado, hoy os vengo a hablar de una de ellas: la gallete.
Se trata de un wrap o tortilla de harina de trigo que envuelve carne, ensalada, patatas fritas y salsa al gusto. Aunque esa es la base de la que parten todas las galletes, ciertas cosas dependen del local al que vayas. Por ejemplo, a veces la ensalada se puede sustituir simplemente por cebolla.
Perdón, que lleva ¿qué?
Efectivamente, tanto las galletes como la mitraillette tienen en su interior lo que podríamos denominar como un menú del día: carne, ensalada, patatas fritas y salsa. Pero es que qué maravilla.
Yendo por partes, empezamos por la carne. Siempre te dan a elegir el tipo de carne que quieres, de forma que normalmente las opciones suelen variar entre carne de kebab, de hamburguesa, pollo… De hecho, el sitio al que fuimos, Manneken Frites, un local de comida para llevar muy cerca de la Grand-Place, ofrecía carne y pollo marinados. A parte de la carne, la ensalada suele incluir lechuga, tomate y zanahoria.
Como aquí las patatas son un arte aparte, tienden a ser generosos con su cantidad y también con la salsa elegida. No esperes poder elegir solamente entre ketchup o mayonesa. En su lugar, estarás más de diez minutos decidiéndote entre salsas como la muy famosa y ya comentada en este blog salsa andalouse, pita, salsa de queso, barbacoa, americanice, pilpil, algeriana, cocktail…
En Bélgica, y sobre todo en Bruselas, la comida se toma muy en serio. Y es que os puedo asegurar que si el beige fuera la gallete, y el esmeralda la mitraillette; no tendría necesidad de añadir otro color a mi armario.
¡Muy buen día, coloridos!
Me llamo Marina Carrasco Valero, estudio Periodismo y Comunicación Audiovisual, y este primer cuatrimestre voy a ser vuestra corresponsal Erasmus en Bruselas. Durante los próximos cinco meses, voy a ser la pequeña puerta que os lleve a tocar, paladear, ver (aunque con un poco de miopía), oler y oír Bruselas. Juntos vamos a descubrir sus secretos, exhibiciones, conciertos, festivales…