¡Hola viajeros!
Como vimos en el anterior post ¡Cosas interesantes e inesperadas de Flandes, Bélgica! , es un país divertido y lleno de cosas curiosas. Y una vez más, este país nos sorprende de nuevo… ¡Hoy veremos el caso de Baarle-Hertog, la frontera más rara de Bélgica y una de las más extrañas del mundo! Prepárate que esto te va a dejar alucinando…
Baarle es especial, se puede tomar una cerveza en un país e ir a tomar un café en otro. También puedes comprar en el país que quieras… Afortunadamente no necesitas enseñar tu pasaporte cada vez que cruzas la frontera ¡sería imposible vivir!
Baarle se compone de partes de Bélgica y los Países Bajos que están tan estrechamente entrelazadas que la frontera entre los dos países atraviesa una serie de edificios diferentes en la ciudad: casas privadas, restaurantes, cafés, museos y galerías. La ubicación exacta de la frontera está marcada en toda la ciudad con cruces blancas. ¿Cómo es eso posible?
La historia de este extraño fenómeno geográfico se remonta a la Edad Media, cuando las propiedades se dividían entre familias aristocráticas. En 1198, el duque Hendrik I de Brabant arrendó tierras en Baarle al señor de Breda, pero a este último se le permitió tomar solo las propiedades que no se habían utilizado para la agricultura; el propio duque se quedó con las tierras que ya estaban cultivadas.
Después de que Bélgica declaró su independencia de los Países Bajos en 1830, se hizo necesario establecer con precisión la frontera entre los dos países. Los topógrafos se abrieron camino paso a paso desde la costa del Mar del Norte hasta la frontera de los estados alemanes, pero cuando llegaron a Baarle, simplemente lo pasaron por alto, dejando los problemas fronterizos allí para ser resueltos más tarde.
Pero eso no sucedió hasta 165 años después: en 1995, se fundaron dos municipios: Baarle Hertog en Bélgica y Baarlae Nassau en los Países Bajos. Incluyen en total 30 enclaves: 22 enclaves belgas en los Países Bajos, 7 holandeses en esos enclaves belgas y 1 enclave holandés en Bélgica.
Williem van Gool dice: Teniendo en cuenta que en total hay sólo unos 60 enclaves en todo el mundo, podemos decir que en Baarle somos campeones del mundo con este número.
Como os podéis imaginar, esto tiene numerosas ventajas e inconvenientes. A lo largo del tiempo es un problema que no se simplificó y muchas casas, calles, parques, establecimientos… tienen partes en ambos países. Se acordó que la nacionalidad del individuo vendría determinada por la localización de la puerta de entrada.
Hay dos de todo en Baarle: dos nombres de ciudades, dos alcaldes, dos administraciones municipales, dos oficinas de correos, pero un solo comité que organiza la cooperación necesaria para el funcionamiento de la ciudad. Cuestiones como qué calles están asfaltadas, quién cuida qué césped o recoge la basura y quién lo paga todo son solo algunos de los problemas a los que las administraciones de este doble municipio tienen que encontrar a menudo soluciones muy especiales.
La armonía de Baarle se vio truncada por la crisis del Coronavirus. Donde unas simples placas de piedra separaban países ahora habían diferencias reales en cuanto a medidas, como por ejemplo un toque de queda en Holanda a las 9pm cuando en Bélgica no, o un cerramiento de las tiendas en Bélgica cuando en Holanda los establecimientos seguían abiertos. Las peluquerías primero estaban cerradas en Bélgica y luego la situación se invirtió. El punto culminante del absurdo llegó cuando una tienda textil que está en ambos países tuvo que ser dividida en 2 por los empleados para que los clientes pudieran seguir comprando en la parte holandesa, cuando los comercios allí aun seguían abiertos. Los ciudadanos holandeses de Baarle podían comprar una camiseta nueva, pero no ropa interior, porque estaba en la parte belga de la tienda.
Os dejo por aquí un video interesante de Baarle y sus fronteras.
Afortunadamente en Baarle las fronteras es algo más simbólico y se interpreta de forma graciosa. Pero no en todos los países es así. Restemos importancia a las fronteras y démoslo a las personas y la cultura.
¡Un fuerte abrazo!
Soy de Ibi, Alicante. Estudio arquitectura en València y este año he podido disfrutar del mejor año de mi vida estudiando el Erasmus en Gante. Ha sido una experiencia única y estoy capacitado para mostrar lo mejor de Flandes, ya que sin duda es uno de los mejores destinos Erasmus por su espectacular y trepidante ambiente universitario, su carácter internacional, sus buenas conexiones y posibilidades de viajar por Europa, la cantidad de planes posibles y su gran efervescencia cultural.
Me considero creativo, positivo y aventurero. Me encanta viajar, conocer gente nueva y vivir nuevas experiencias, aprendiendo mucho de los fracasos. Deporte, arte y debate son mis hobbies. Este año ha sido complicado y excepcional, formo parte de la primera generación que vive un año entero de Erasmus en una situación de pandemia, creo que puedo aportar nuevas perspectivas y enfoques al blog.