Hace algunas semanas os contábamos cómo se vivió la Segunda Guerra Mundial en Amberes, la ciudad más grande de Flandes. A diferencia de España, Bélgica fue gravemente golpeada por esta guerra. La población belga sufrió de primera mano un impacto cuya huella puede verse a aún hoy en día si uno sabe qué y dónde buscar. Hoy nos vamos de Amberes a Genk, la capital de la minería flamenca, para descubrir el impacto de la Segunda Guerra Mundial en las vidas de los mineros.
Composición representativa de la vida en la mina, expuesta en C-Mine.
Corría mayo de 1940 cuando Bélgica se vio envuelta en el conflicto. A pesar de haberse mantenido neutral, la invasión alemana terminó por llamar a su puerta arrastrándola a la guerra. Harie Janssen, trabajador de la mina de Winterslag, estaba a punto de terminar el turno de noche cuando escuchó los gritos del botones rebotando por el túnel. «¡Hay un mensajero ahí arriba que dice que estamos en guerra! ¡Tenéis que iros! Todo el mundo a casa, ¡fuera de aquí!» Aunque parezca sacado de un cuento, estos hechos realmente ocurrieron la noche del 10 de mayo. Así se relatan en C-Mine, el actual museo de la mina de Winterslag.
Ese día marcó el comienzo de un período oscuro en la historia de la mina. La vida cotidiana durante la guerra significaba, como en tantos otros sitios, vivir de sellos. Ante la escasez y la falta de recursos, la población necesitaba un vale para realizar cualquier tipo de compra. Y es que la mayor preocupación en cualquier hogar era encontrar suficiente comida. De todas las minas de Flandes, solo la de Winterslag se mantuvo activa durante la guerra. Eso sí, su producción se ralentizó considerablemente. La comunidad se encargaba de que los mineros colaboradores pudieran gozar de prioridad en la distribución de alimentos. Además, se crearon organizaciones como Winterhulp –Ayuda de invierno– para garantizar el acceso de los niños a alimentos y suplementos vitamínicos.
Túnel de la mina de Winterslag, reconvertido en exhibición de C-Mine.
Es muy importante seguir transmitiendo estas historias aunque pasen cientos de años. Únicamente con esta breve descripción de los horrores de la guerra se puede percibir su dolor y el por qué de la necesidad de trabajar para evitarla. Si quieres conocer más detalles sobre la historia de las minas, te recomiendo que visites C-Mine. En su página web encontrarás todos los detalles sobre horarios y eventos. Mientras tanto, no pierdas de vista el blog para seguir descubriendo el patrimonio de Flandes y todo lo que este tiene por ofrecerte durante tu estancia Erasmus. ¡Nos vemos en el próximo artículo!
¡Hola! Mi nombre es Pablo y desde hoy hasta el próximo mes de junio seré tu corresponsal de patrimonio de confianza. Soy estudiante de Comunicación Audiovisual en la Universitat Politécnica de València, pero este año he tenido la oportunidad de hacer mi Erasmus en Malinas, provincia de Amberes. Aquí estoy cursando el short Programme en International Media & Entertainment Business de la Thomas More University of Applied Sciences.
Llevo cinco meses aquí, y en este tiempo he podido explorar Flandes y conocer su cultura muy de cerca. He viajado y me he colado en la comunidad flamenca para traerte la información como un local lo haría, ¡así que prepárate para conocer el patrimonio más curioso de Flandes!