Al poner un pie en Amberes y pasear sus preciosas y acogedoras calles, es imposible no darse cuenta de la cantidad de iconos católicos que puedes encontrar a cada paso, que muestran la vinculación de la ciudad con su tradición religiosa. Esta presencia, sin embargo, no deja de sorprender, dado que Flandes es una región de mayoría protestante. Prácticamente en cada esquina de cada manzana de edificios se yergue un ornamentado altar a la Virgen María. ¿Por qué? te estarás preguntando. La respuesta tiene que ver con nosotros, los Españoles.
Resulta que durante el siglo XVII, Amberes estaba bajo dominio español, país que sabemos es de tradición católica. Con la llegada de la reforma protestante, el reino empezó a tener ciertos problemas con la población, que renegaba del catolicismo y se decantaba por este nuevo acercamiento al cristianismo. La ciudad de Amberes era muy próspera y rica (hoy sigue teniendo el segundo puerto más grande de Europa), así que perder su control no era una opción para los Españoles. Así que, con la intención de hacer propaganda católica, eximían de impuestos a aquellas casas que tuvieran un altar a La Virgen.
Otra prueba de la prosperidad de la ciudad, tanto económica como culturalmente, son las increíblemente abundantes iglesias. Es sorprendente la frecuencia con la que, andando por el centro, te cruzas con una monumental y majestuosa iglesia, habitualmente de estilo gótico o barroco. Yo misma vivo al lado de una y estudio todos los días frente a otra. El arte y arquitectura de más elevado nivel toman parte del día a día de los habitantes de Amberes hasta tal punto, que puede que no siempre les prestemos la atención que requieren. Por ello, hoy voy a hablaros de una de las muchas iglesias de la ciudad: la iglesia de San Jorge.
La iglesia de San Jorge se caracteriza por un pasado tumultuoso y una historia de cambios. Se tiene constancia documental de la existencia de la iglesia desde el siglo XIII, cuando todavía estaba tras las murallas de la ciudad. Durante el año 1566, la iglesia fue víctima de disturbios iconoclastas y el mobiliario de su interior fue destruido, y más tarde fue ocupada por calvinistas. El año 1997, durante la última etapa de la Revolución Francesa, la iglesia fue destruida por completo y se construyeron nuevos edificios encima. El 1846 se inició el proyecto de construcción De la Iglesia de San Jorge tal y como la conocemos hoy en día, tras la adquisición de los terrenos por parte del pastor Jan Van Cauwenbergh. El proyecto fue dirigido por el arquitecto León Suys, que diseñó una iglesia Neo-gotica muy acorde con el espíritu de la ciudad de Amberes, y muy innovadora para su época.
Si quieres ver el resultado final de tal reconstrucción no te pierdas esta monumental iglesia, que se encuentra a tan solo dos calles del Stadspark, lo que la convierte en el destino ideal para visitar un tranquilo día de paseo por la ciudad. Consulta sus horarios de apertura aquí y planea tu visita.
