Ahora que ha empezado el veranito, debéis saber que también se va a la playa en Bélgica. Es un falso mito lo de que llueve cada día, aquí también sale el sol. Es más, ¡estos días estamos llegando a 30 grados!
La típica ciudad belga famosa por su puerto y playa es Ostende, una ciudad cosmopolita con muchos hoteles y yates. Además de sus 8 km de playas de arena, es muy conocida por su gastronomía marítima. Algunas de las especialidades son los mejillones, el lenguado y las gambas en croquetas.
Otro lugar menos conocido es De Haan, un precioso pueblo costero de Bélgica. Sus 11 km crean unas dunas de arena fina, en las que puedes disfrutar del sol y de un buen helado de Speculoos (la galleta típica belga).
Tengo 21 años y nací en Barcelona, aunque vivo en Cambrils, un encantador pueblo marítimo en la provincia de Tarragona. Estudio química en la “Universitat Rovira i Virgili” de Tarragona y he venido aquí para acabar mi carrera universitaria en la UC Leuven-Limburg (associada a la KU Leuven).
¿Y porque decidí presentarme a esta beca para ser corresponsal de Erasmus en Flandes?
Porque soy una química con intereses de “blogger”. Así soy yo, un poco de aquí y un poco de allá, con intereses tan diversos que comprenden desde la ciencia hasta la fotografía, desde la cultura hasta la fiesta y desde los gofres hasta la cerveza belga. Me apasiona viajar, aprender, reír, comer, disfrutar y vivir la vida al límite… Es por ello que decidí acabar mi carrera universitaria en la Salamanca de Europa, Lovaina, y así no perder la esencia de mis raíces.