La universidad y los círculos universitarios siguen dándonos de qué hablar. Esta vez han organizado la Vinicole, un evento que recuerda sensiblemente a la Brassicole de la que hablé hace unas semanas, pero esta vez el gran protagonista es el vino.
Esto ya nos suena más familiar. El vino y su mundo. Resulta que había que venir a Bélgica para asistir a la primera feria del vino de nuestra vida. Pues así ha sucedido, y no es que no nos guste, quizás es que en España como es tan común no nos llama tanto la atención y sin embargo aquí cual recuerdo patrio acudimos a ver como llevan estos estudiantes belgas su relación con el vino que os aseguro, en días normales, es bastante escasa.
Por otra parte, mucho me temo que en España las ferias dedicadas al vino son mucho más espectaculares ya que en esta ocasión parece que este evento ha pasado de puntillas por el campus de la universidad, estamos en la país de la cerveza, qué le vamos a hacer.
El formato era parecido al de la Brassicole, pero esta vez no había unas carpas tan grandes como en esta, sino que se ha desarrollado en interiores, los dos primeros días en uno de los prefabricados de la universidad, lugares reservados para las actividades realizadas por los círculos y el tercer día en un recinto algo más grande dentro de uno de los edificios de la universidad, el hogar cultural.
Tres días duró este evento, desde el miércoles 27 de marzo hasta el viernes 29, moviéndose el viernes de lugar, para la celebración de una Jam Session que amenizó la velada. Los participantes de este concierto improvisado, desde miembros del círculo organizador o cualquier persona que acudía y le apetecía subirse, hasta estudiantes que daba la impresión que ya estaban muy acostumbrados a esto del Jamming.
El círculo de Bioingenieros, los agrónomos de la ULB, han sido los encargados de quitar un poquito el protagonismo habitual de la cerveza en cada tarde/noche de fiesta belga e intentar que el vino remplace su lugar. Vinos de diferentes procedencias, colores, gustos y olores fueron nuestros acompañantes en estas jornadas del vino en la universidad. Una buena oportunidad para volver a la cultura de este brebaje que de alguna forma nos transporta un poquito más al sur de Bélgica.
¡Salud!