Medieval versus contemporáneo
Lo medieval y lo contemporáneo se dan la mano en Dijleterrasen donde puedes pasear bajo la sombra del muro Handbooghof, como muchas otras parejas desde la Edad Media, o tomar algo en las terrazas de Dyle. Se abrieron en 2011, pero ya son uno de los lugares favoritos para las parejas que quieran sentarse tranquilamente. A medida que cae la tarde, las terrazas se convierten en un moderno y acogedor entorno al que lo único que falta es la música.
Perdón a la pareja de la foto por violar su derecho de imagen, pero necesitaba demostrar que en estos sitios fluye el amor. Una tiene que ganarse la credibilidad y eso.
¿Un nuevo afrodisíaco?
The Wagehuys es parte del centro cultural 30CC de Lovaina, pero en sus orígenes los edificios eran parte del hospital de las hermanas agustinianas. En el siglo XVIII había un rumor persistente en la ciudad: las hermanas daban la bienvenida a sus invitados con un “French kiss”. Puede que su efusividad fuera provocada por probar demasiadas hierbas medicinales de la farmacia del hospital, que estaba localizada en el actual restaurante Improvisio. Mientras que antes los afrodisíacos se conseguían a escondidas, ahora puedes pedir el licor de banana “Musa Lova” y descubrir por ti mismo si también funciona.
Una boda lovaniense
¿Cuántas parejas se han conocido en Oude Markt, el que ha sido el lugar de encuentro para los estudiantes durante siglos? ¿Y cuántos corazones han sido rotos aquí? En 1085, el artista Fred Bellefroid creó la estatua de bronce de “De Kotmadam” (la casera), que vigila las terrazas de los estudiantes. Controla tus impulsos, porque aquel que embarace a alguna joven se verá obligado a una “boda lovaniense”. Hay más que suficientes cafés para ahogar las penas del desafortunado matrimonio forzado: la Oude Markt es considerado como “el bar más grande del mundo”.
Residencia de estudiantes se convierte en un burdel
El majestuoso Colegio del Espíritu Santo es una de las pocas residencias de estudiantes que quedan en Lovaina donde solo viven hombres. Pueden ser tanto estudiantes como sacerdotes y monjes de países en vías de desarrollo. Está prohibido que las chicas pasen la noche, aunque seguro que los residentes se han saltado esa regla no una, sino muchas veces. Cuando el gobierno francés redujo la universidad de Lovaina en 1797, a muchos edificios universitarios se les dio una función distinta. Este distinguido colegio se convirtió en un gigantesco burdel. Con las mujeres ofreciendo este servicio, el edificio nunca había visto tantos hombres entrando por sus puertas.
