El primer domingo de cada mes, la moda del Brussels Vintage Market se instala en Halles Saint-Géry, en pleno corazón histórico de Bruselas. Por lo tanto, se celebrará este domingo 3 de noviembre.
Para introduciros dentro del mundillo y saber de qué trata este mercadillo, primero hay que entender bien la palabra “vintage”. El concepto vintage es una palabra inglesa (hoy en día popularizada en todo el mundo) que proviene del mundo del vino. Se usa para designar objetos antiguos ya sea en moda, muebles, coches que debido a su edad no llegan a ser considerados una antigüedad pero que tienen “algo” que los hace especiales.
En este mercadillo, los comerciantes venden pequeños muebles hechos a medida, accesorios de cualquier tipo, ropa de segunda mano… Pero lo que realmente hace que este mercadillo atraiga a mucha gente es los numerosos diseñadores que aprovechan la oportunidad para mostrar al público sus hazañas. Mientras realizas las compras o echas un vistazo también puedes almorzar o tomar algo con los amigos y completar un buen fin de semana combinando estos dos placeres.
En el Brussels Vintage Market puedes comprar de todo: zapatos, carteras, chaquetas,bizcochos, accesorios para la decoración interior, botas,camisetas… Los diseñadores ofrecen las últimas tendencias a través de su mejor ropa. El Vintage Market es conocido no sólo en Bélgica sino en muchos países vecinos, atrayendo continuamente a sus habitantes a descubrir tesoros inesperados.
Sería una genial manera de terminar la semana, ¡¡Estáis avisados!! Este próximo domingo, no tenéis excusa. Podéis seguir informados en su página web, o con este vídeo.
Soy Mayte Hervás y seré la nueva corresponsal Erasmus durante los próximos 5 meses en la ciudad de Bruselas. Lo cierto es que tengo muchas ganas de empezar esta nueva etapa en el blog, en el que podréis echar un vistazo a mi forma de ver la vida belga con alegría y humor, aunque también seré seria cuando tenga que serlo.
Curiosear por el extranjero es una gran virtud que se instaló en mí desde muy pequeña y por ello he esperado tres largos años de mi carrera de traducción para poder conseguirlo. ¡Me voy a Bruselas, y encima corresponsal!
Bruselas siempre ha captado mi atención, no solo por ser el centro neurálgico de Europa, sino por las diferencias culturales que existen entre la capital de Bélgica y España. Toda mi vida he vivido en una pequeña ciudad de Albacete (Hellín) y desde que me fui a estudiar he estado viviendo en Alicante; ambas ciudades completamente opuestas a la capital grande y europea que me va a acoger este año.La cantidad de eventos musicales que oferta Bélgica, que va desde pequeñas salas con música en directo hasta festivales, ¡me tiene impaciente por llegar!