Otro de los grandes pasatiempos de Bruselas
La Rue Neuve es la calle de las compras belgas por excelencia y situada cerca de todo, en el corazón de Bruselas. Es una gran zona para ir de compras, especialmente si estás buscando las marcas internacionales regulares. Tiene una gran mezcla de moda por toda su extensión, un montón de tiendas de zapatos con una buena relación calidad-precio y prácticamente todos los aparatos electrónicos que puedas desear.
Genial para ir de compras e incluso para comer o beber algo. Hay mucha variedad de puestos de comida rápida, varios cafés y los típicos y riquísimos gofres belgas que puedes disfrutar durante una mañana de compras o de paseo. En esta calle puedes encontrar también las famosas galerías belgas INNO (algo así como el CorteInglés de aquí…)
Cerca del barrio de Ixelles también hay una calle con muchas cadenas de ropa internacionales, pero realmente te sientes en una ciudad verdadera al pasar por la Rue Neuve: edificios altos, tiendas con muchas plantas, buen olor a chocolate por las calles y variedad de todo lo que puedas imaginar.
Te sientas en uno de esos bancos a observar a todo tipo de gente y a tomarte un tentempié y te das cuenta de que, comparándola un poco con España, esta es la Gran Vía (como muchos dirían) de Bruselas y una calle con encanto propio.
Como curiosidad también te puedes encontrar puestecillos según el día, hoy por ejemplo, había un puesto de flores….
Soy Mayte Hervás y seré la nueva corresponsal Erasmus durante los próximos 5 meses en la ciudad de Bruselas. Lo cierto es que tengo muchas ganas de empezar esta nueva etapa en el blog, en el que podréis echar un vistazo a mi forma de ver la vida belga con alegría y humor, aunque también seré seria cuando tenga que serlo.
Curiosear por el extranjero es una gran virtud que se instaló en mí desde muy pequeña y por ello he esperado tres largos años de mi carrera de traducción para poder conseguirlo. ¡Me voy a Bruselas, y encima corresponsal!
Bruselas siempre ha captado mi atención, no solo por ser el centro neurálgico de Europa, sino por las diferencias culturales que existen entre la capital de Bélgica y España. Toda mi vida he vivido en una pequeña ciudad de Albacete (Hellín) y desde que me fui a estudiar he estado viviendo en Alicante; ambas ciudades completamente opuestas a la capital grande y europea que me va a acoger este año.La cantidad de eventos musicales que oferta Bélgica, que va desde pequeñas salas con música en directo hasta festivales, ¡me tiene impaciente por llegar!