Sí, ya sé que el invierno no empieza hasta el 21 de diciembre pero en Amberes ya está aquí, y no me refiero porque haya que usar bufanda, gorro y guantes y las temperaturas sean (alguna vez que otra) bajo cero, ni si quiera porque ya se haya visto caer los primeros copos de nieve, sino porque el sábado pasado la ciudad dio paso al invierno con un festival de apertura que coincidió con la del mercadillo de navidad (que estará en la ciudad hasta el día 5 de enero).
Este festival de apertura del invierno, que atrajo a multitud de personas, consistió en una serie de espectáculos callejeros que se desarrollaron por las zonas más características de la ciudad.
Para comenzar, Orryflammes, un espectáculo de malabaristas de fuego en Astridplein. Seguido de Les Nomades, un desfile desde la estación central hasta Grote Markt caracterizado por una especie de flamencos que bailabann al ritmo de la música. Mientras, desde Steenplain hasta la plaza del ayuntamiento se podían ver a los Vuurmeesters, un desfile caracterizado por el fuego y los malabaristas. Si te paseabas por el centro de la ciudad podías encontrarte con los AquamenS, unos señores que llevaban unas peceras en la cabeza ¡¡¡con peces reales dentro!! También se pudieron ver Les Sphères, arlequines dentro de una burbuja que se movían mediante un baile elegante y acrobático. ¿Y qué me decís de Les Intermutants? Armados de tambores luminosos, estos seres de otro planeta llevan a la humanidad su danza con ritmos intergalácticos a la que era difícil resistirse. Por otro lado, en Handschoenmarkt, la plaza de la catedral, la música de la caravana de De Koninck ayudaba a sobrellevar el frío. Sobre las 21-22 horas, Rêve d’Herbert, unas siluetas y sombras blancas gigantescas que paseaban por la ciudad con sus movimientos lentos y delicados. Para finalizar, fuegos artificiales en Steenplain.
Aquí os dejo un vídeo de Rêve d’Herbert, ya que no aparece en los vídeos pero me parece digno de ver . ¡Una pena!
Un díalleno de luz, color y magia. ¡Así da gusto que llegue el invierno!
Soy Sara Sanz Cuesta, estudiante de traducción e interpretación en la Universidad de Alicante pero nacida en Casas Ibáñez, Albacete. Durante los próximos meses seré la nueva corresponsal Erasmus en la ciudad de Amberes.
Como estudiante de idiomas que soy, siempre he tenido en la mente la posibilidad de solicitar una beca Erasmus para completar mi formación. Fue en diciembre del año pasado cuando llegó el momento de escribir los destinos en la lista de prioridades: París, Londres, Roma, Berlín, Dublín… y ahí, entre esa lista interminable de capitales europeas, estaba Amberes. Reconozco que al principio no sabía localizarla en el mapa pero conforme fui buscando más información sobre esta ciudad belga, más me fue gustando como destino para esta experiencia. Fue en febrero cuando llegó la gran noticia: ¡MAMÁ! ¡Que me voy de Erasmus a Amberes!
Amberes es la segunda ciudad más importante de Flandes. Situada a unos 45 km de Bruselas y cuenta con medio millón de habitantes, bañada por el río Escalda, es una ciudad cosmopolita, cuna del arte, la moda y Centro Mundial del Diamante, pero eso no es todo, Amberes tiene muchas más cosas por descubrir.