En la zona de Plattesteen, en pleno centro de Bruselas, os encontraréis una columna azul en medio de la acera. ¿Y eso qué es? Seguid leyendo…
Esta es la zona de ambiente de Bruselas, que se extiende desde la Bourse hasta aquí más o menos por todas las callejuelas que llevan a la Grand Place, si paseáis por allí veréis un montón de bares con la bandera gay ondeando.
Esta torre es una obra del diseñador y artista Jean.François Octave, inaugurada el 17 de mayo de 2007, y cuya localización exacta es el número 41 de la Rue du Marché au Charbon, en un cruce de calles y delante de una tienda de disfraces muy grande.
Octave tituló a su obra Ma Mythologie Gay – Un monument de tout le monde (Mi mitología gay – Un monumento de todo el mundo). Y efectivamente, las cuatro paredes de este prisma están cubiertas de los nombres de figuras emblemáticas para la homosexualidad y la lucha contra la homofobia, en las que te puedes encontrar desde Madonna a James Dean.
En una inscripción que se encuentra en la parte baja de dos de los lados de esta columna, el autor explica: “Cette colonne en hommage à la liberté d’esprit, reprend, au-delà des identités sexuelles, des personnages emblématiques de l’histoire et de l’actualité gay, des icônes ainsi que des inconnus, gay ou non” (En esta columna, en homenaje a la libertad de espíritu, están representados, más allá de las orientaciones sexuales, personajes emblemáticos de la historia y de la actualidad gay, iconos así como personas desconocidas, sean gays o no).
Ya sabes, si pasas por aquí, párate un momento a leer esta obra de arte que puede pasar fácilmente desapercibida.
À bientôt!
Soy María Ballesteros, vuestra nueva corresponsal en Bruselas. Estudiaré cuarto de Traducción e Interpretación en la Haute École Francisco Ferrer (HEFF) hasta (mínimo) febrero. El amor de mi vida son los viajes, y por eso hace un año más o menos decidí que quería pasar una buena temporada fuera de España, conocer otro país y gente nueva y vivir una experiencia inolvidable. ¿Y qué mejor que una beca Erasmus?
Desde el principio lo tuve claro; quería que mi destino fuera Bruselas. ¿Por qué? Porque es la capital europea por excelencia, está en el centro de Europa y te permite viajar barato a muchísimos sitios, es muy cosmopolita, allí nadie es extranjero, tiene un ambiente inigualable, está lleno de estudiantes universitarios (especialmente Erasmus)… y paro ya, que si no, no acabo nunca. No quería otro destino y al final, después de mucho papeleo, aquí estoy!