Tal vez no hayáis oído hablar de la ciudad de Binche, municipio de unos treinta mil habitantes situado a unos 80 kilómetros de Bruselas. Sin embargo puede que os resulte más familiar el atuendo de los Gilles, el personaje folclórico del que miles de hombres del municipio se caracterizan para celebrar Mardi Gras según la tradición popular.
Si aún ni por esas conocéis la historia del Carnaval de Binche, desvelamos algunos detalles que permitirán conocer esta tradición.
El Carnaval de Binche se celebra cada mes de febrero en la ciudad belga de Binche, accesible para los turistas mediante tren. Constituye un gran atractivo turístico que atrae anualmente a miles de visitantes, deseosos de presenciar el desfile y participar en el ambiente festivo que reina en el pueblo. El evento forma parte incluso del Patrimonio Mundial inmaterial de la UNESCO.
- ¿En qué consiste el Carnaval de Binche y qué se presencia?
Las festividades “pre-Carnaval” comienzan en realidad seis semanas antes de Mardi Gras, en domingo. Estas consisten por lo general en ensayos musicales de los instrumentos que acompañarán a los Gilles y el resto de personajes que desfilan durante “les jours gras”. Los futuros Gilles también salen a la calle calzados con los tradicionales sabots y su apertintaille (un cinturón del que cuelgan campanillas), elementos que componen su disfraz, para bailar al ritmo de los tambores agitando el ramon, accesorio del disfraz de Gille que recuerda a un trozo de escoba considerado indispensable para marcar los tiempos en la danza. La mañana de Mardi Gras el Gille lanza su ramon a la persona especial que reconozca entre el público, gesto de reconocimiento muy valorado popularmente.
El Dimanche Gras los futuros personajes del martes aparecen disfrazados en la ciudad con un traje distinto cada año, confeccionado meses antes en el mayor secretismo.
Desde las siete de la mañana del domingo los participantes recorren las casas del pueblo al son de los tambores o de la viola para que los visitantes puedan admirar sus trajes y la celebración continúa hasta bien entrada la noche.
El Lundi Gras es una fiesta más íntima donde los habitantes se reúnen principalmente entre ellos. Es una jornada donde la actividad se dirige principalmente a jóvenes y niños. El respeto de la tradición es tal que este es el día donde se reúnen por excelencia las tres Juventudes Binchoises (la Juventud Real Católica Binchoise, la Joven Guardia Liberal y la Juventud Socialista) en el seno de la Asociación de Defensa del Lundi Gras (la ADL), con el objetivo de defender y promover esta fiesta.
Desde las diez de la mañana las Juventudes salen en grupos por el pueblo, desplazándose de bar en bar mientras recorren la ciudad bailando. Durante la mañana se organizan guerras de confeti y por la tarde tiene lugar la tradicional entrega de naranjas. El origen de esta práctica resulta incierto: parece ser que siempre se entregó algún alimento a los visitantes (nueces, pan, manzanas…) y que las naranjas de Binche (o naranjas sanguíneas) fueron elegidas por simbolizar una puesta de sol.
Por último, el Mardi Gras es el día más turístico y especial. Este empieza cuando los Gilles (el personaje principal del Carnaval) se visten con el traje tradicional, un momento familiar íntimo y de gran significado para los habitantes de Binche. Al amanecer, el primer Gille sale de casa acompañado de “tamboureurs” y a veces de un “joueur de caisse” así como de amigos y familiares para recorrer la ciudad recogiendo a los otros Gilles en sus hogares. Durante la mañana, el resto de personajes (los Campesinos, los Arlequines y los Pierrots) se reúnen en la Grand Place donde Gilles y Campesinos se colocan su máscara de cera, y se reúnen con las autoridades comunales.
Hacia las 15.00, se produce el desfile tan esperado por los turistas, donde los Gilles reparten las naranjas, esta vez sin máscara pero con sus enormes sombreros de plumas de avestruz. Hacia las 20.00 comienzan los fuegos artificiales, momento en el que los Gilles se quitan los sombreros. Hacia las 21.30 se organiza en la Grand Place un gran fuego prendido a partir de los sacos de paja que componen el interior de los trajes de Gilles.
- La figura protagonista: el Gille
El día de Mardi Gras en Binche son aproximadamente mil Gilles los que participan en esta jornada festiva. El traje de Gille es exclusivo de los hombres que provienen de familias binchoises o que residen en Binche desde hace al menos cinco años. La participación en el Carnaval se rige por reglas muy estrictas que asociaciones como la ADF (de defensa del folclore) se encargan de salvaguardar.
El llamativo traje de los Gilles se compone de una blusa y un pantalón decorados de ciento cincuenta motivos (estrellas, leones y coronas) en colores negro, amarillo y rojo. El momento de vestirse al amanecer constituye una verdadera ceremonia para los participantes y sus familias. Durante esta, la blusa es rellenada de paja, por delante y por detrás. Esta misma será la que se utilice la noche de Mardi Gras para crear el fuego en la Grand Place. El disfraz es completado con la aperintaille en la cintura, la barrette (gorro de algodón blanco), un pañuelo colocado bajo el cuello y anudado a la cabeza para sostener la barrette, y unos sabots de madera. Durante el desfile de Mardi Gras el Gille lleva un majestuoso sombrero de plumas de avestruz que, junto al traje, no le pertenecen sino que alquila.
A este atuendo hay que añadir la famosa máscara de cera que el Gille coloca al llegar al Hotel de Ville: en ella se representa una cara con gafas, bigote, una perilla y patillas.
- Curiosidades
– La mañana de Mardi Gras, cuando todos los Gilles se encuentran reunidos, se dirigen a desayunar champán y mejillones.
– Los Gilles son únicamente hombres. Allí participar en el Carnaval es un gran honor para sus ciudadanos.
– Está terminantemente prohibido que los Gilles lleven su traje tradicional fuera del Mardi Gras. Tampoco pueden salir de los límites de la ciudad.
– Binche ha hecho del Carnaval un atractivo turístico los 365 días del año: podéis visitar el Museo Internacional del Carnaval y la Máscara.
– La pasión por su Carnaval ha llevado a su protección por la Asociación de Defensa del Folclore y la Asociación de Defensa del Lundi-Gras.
– Solo existen tres ciudadanos binchois encargados de arrendar los trajes tradicionales de Gilles, todos descendientes de la misma familia.
– Binche posee la patente de las máscaras de cera de los Gilles: solo pueden llevarse allí y venderse a los Gilles a través de sus sociedades.
– Los participantes se encuentran agrupados en sociedades, encargadas de ocuparse de sus miembros (ya sean Gilles, Pierrots, campesinos…), de reclutar músicos, organizar la recogida de sus miembros de casa en casa los días indicados, y mantener su cohesión a través de la figura de los comisarios.
Y aquí os dejo como siempre el vídeo para animaros a ir!