Hay tendencia a correr cuanta más prisa tenemos, pero siempre hay seres sabios que nos recuerdan un buen dicho: “ Vísteme despacio que tengo prisa”. Así es como describo yo el café de la Maison Renardi. Un lugar que invita a empezar las mañanas poco a poco y con buen sabor para cumplir todos los objetivos del día. Entra, siéntate y desayuna como una reina.
Es un lugar sofisticado, elegante, cuidado pero asequible para todo el mundo que quiera desayunar a un ritmo tranquilo. Está compuesto por pequeñas mesas junto a un gran ventanal donde puedes observar la cotidianidad del barrio africano de Matonge, al lado de Ixelles. Este café es un tesoro escondido y quienes entran se familiarizan fácilmente con su cálido ambiente.
La Maison Renardi es un negocio familiar que empezó en 1912 con tradicionales y ricas recetas caseras. Éstas, con una larga historia detrás, aún continúan elaborando chocolates, bombones, pastas, panes, y mermeladas.
También tienen más de 20 cafés y 100 tés de todo el mundo para escoger. ¡A cuál más bueno! Y el “toque” especial de la casa es sin duda su forma de servir tu pedido. Utilizan una clásica vajilla blanca y te invitan a degustar uno de sus bombones caseros. Finalmente, decoran de música clásica el lugar. Y no es que sea un lugar lujoso, sino que miman los pequeños detalles para que puedas disfrutar de tus primeras horas mañaneras que van a marcar el resto del día.
Hablando de precios, no es un lugar caro como lo podría a llegar a ser. Por ejemplo, el café con leche cuesta 2,50 euros.
Y para todos/as aquellos/as que les gusten sus productos, también los podéis comprar para llevar (¡sobre todo sus tarros de mermelada!).
Los horarios son de martes a viernes de 7,30h a 18,30h, y los sábados de 8h a 18h.
Se encuentra en le Chaussée de Wavre, 111b.
Y tú, ¿Cómo escoges empezar el día?