Amberes, como toda ciudad flamenca que se precie posee su propio beguinaje. Pero ¿qué es un beguinaje? Un oasis de tranquilidad, un remanso de paz, un lugar para la vida tranquila y contemplativa… Eso es lo que es ahora un beguinaje. Pero cuando surgieron los beguinajes era algo más y muy importante para las mujeres.
El beguinaje (begijnhof en neerlandés) que encontramos en Amberes, escondido en la calle Rodestraat 39 en lo que es de pleno el barrio universitario, data de 1545 y fue construido tras la destrucción del primer beguinaje que existía en Amberes extramuros al sur de la ciudad, llamado Het Hof Sion (1240 – 1542).
Todas las beguinas vivían en comunidad, sin votos religiosos, no hay que confundirlas con mojas. Su intención era vivir en una comunidad libres de los hombres, motivo por el cual tampoco se casaban, y divulgar su ciencia, obras de literatura espiritual.
Llegaron a ser mas de 200.000 en toda europa antes de ser perseguidas por la iglesia y la insquisición. No obstante, aunque el máximo esplendor del beguinaje tuvo lugar entre los siglos XIII y XIV, este movimiento se mantuvo hasta hace relativamente poco tiempo, muriendo la última beguina de Amberes,Virginia Laeremans, en 1986.
El beguinaje de Amberes tuvo capacidad para unas 200 beguinas y contaba con una iglesia que fue destruida en 1799 y fue reemplazada por la que hoy encontramos, la iglesia de St. Catherine, en 1827.
Hoy en día esta zona ha sido adquirida por particulares, de clase media-alta, siendo una zona residencial mas pero con la tranquilidad y paz que caracterizaba a los beguinajes, oasis de tranquilidad en el centro de la ciudad. Es curioso como otros beguinajes, como el de Leuven, se ofrecen incluso a trabajadores de la propia universidad de Leuven para vivir allí hasta 3 años.
¡Atentos al reloj porque este oasis de tranquilidad cierra sus puertas a las 18h!
¿Os apetece un día tranquilo para pasear y sentaros en un jardín silencioso en vuestro #erasmusamberes?