Todos los Erasmus experimentados están ya familiarizados con los clubs en los que la entrada es gratis en determinados días de la semana: De Kaai, Café d’Anvers, Red and Blue… Sin embargo, existen en Amberes infinidad de locales no tan asequibles para el bolsillo de un estudiante pero que, sin duda, merecen al menos una visita. Hoy os presento en este post uno de ellos, especialmente dedicado a aquellos amantes de la música electrónica.
Justo debajo de uno de los edificios estrella de la ciudad, la Estación Central de Amberes, se encuentra Ampere, un local nocturno de estilo “urban” y “youth culture“. Sorprende un poco que un local tan moderno y alternativo se encuentre literalmente debajo de la estación de trenes, conocida por la belleza de su delicado diseño.
El local se encuentra en la calle Simonsstraat 21, abre viernes y sábado y permanece abierto toda la noche (de 23:00 a 7:00). Los precios en noches de sesión pueden ascender hasta los 15 euros, pero también puedes encontrar sesiones de 6 euros o, incluso, algunas noches el local abre de manera gratuita (así que tenéis que estar muy atentos). El ropero consiste en un sistema de taquillas (pagas por cada vez que abres la taquilla) y las bebidas van por el pesado método de los tickets. Sin embargo, las ocho horas de buena música y el ambiente (con constante juego de flashes) de manera ininterrumpida, merecen totalmente la pena.
Soy Marina y desde hoy hasta junio soy la corresponsal de este blog en la ciudad de Amberes. Estudio Lenguas Modernas, Cultura y Comunicación en inglés y alemán en la UAM . Tal vez no lo sepáis, pero tanto el inglés como el alemán tienen una hermana no tan agraciada actualmente: el neerlandés. Por lo tanto, si sabes inglés y, especialmente, alemán ya tienes mucho camino recorrido en el aprendizaje de esta lengua (con nada más y nada menos que 38 millones de hablantes). Con lo cual, aprender neerlandés resulta una oportunidad difícil de desperdiciar (la típica oferta 3×2).
Por otro lado, resulta casi imposible evitar admirar la belleza de Flandes y sus ciudades portuarias, que nos dejan estampas dignas de ilustrar postales de Navidad. Paseas por Amberes y degustas de manera gratuita infinidad de sabores y matices del arte: el arte religioso y mitológico, el arte gastronómico, el arte moderno, el arte de la aristocracia, el arte de la moda e incluso el arte industrial.