Si tienes visitantes y quieres llevarles a algún bar a tomar una cerveza, no dudes en ir a “Théâtre de Toone”. Se trata de una taberna en la que se encuentra uno de los teatros de marionetas más antiguos del mundo.
Fue creado en el Barrio de Marolles en 1830 por el primer Toone, pero después se trasladó a Ilot Sacré, junto a la Grand Place. El origen de este teatro se remonta a la época en la que reinó Felipe II, quien hizo cerrar todos los teatros de comedia por miedo a ser criticado por la gente en sus obras. Fue entonces cuando, en el Barrio de Marolles, bajo total clandestinidad, se sustituyó a los cómicos por las marionetas, naciendo este famoso tipo de teatro.
Su gerencia se ha ido heredando por un titiritero elegido a la vez por su predecesor y por el público popular, hasta llegar a Toone VIII, quien está ahora a cargo. ¿Por qué se llama Toone? Este nombre es un diminutivo bruselense de Antoine, el primer titiritero de este teatro.
La taberna, decorada con marionetas por las paredes y el techo, cuenta no sólo con el teatro, sino también con una videoteca, un taller de confección de marionetas y un museo, para el cual se ofrecen visitas guiadas. Las obras de marionetas se representan los jueves, viernes y sábados a las 20h30, aunque los sábados también hay a las 16h. Su duración es de dos horas y cuenta con un repertorio de unas 200 obras, que pueden ser representadas en neerlandés, inglés, alemán, italiano y español. Su precio es de 12 euros por persona. Para los estudiantes, hay un descuento de 3 euros en la entrada (¡algo es algo en estos tiempos de crisis!).
Además, cuenta con una carta de cervezas muy variada, quizá una de las más completas de toda Bruselas (podrás probar las famosas Gueuze o Kriek), y se encuentra en el centro de Bruselas, ¡a dos minutos de la Grand Place!
Estoy segura de que a todas las visitas que lleves les va a gustar este bar. Ve a Rue du Marché aux Herbes 66, y sumérgete en una obra mágica.