Con ocasión del cincuentenario de la independencia de Bélgica, el rey Leopoldo II desea convertir la planicie de Koekelberg en un distrito real. Debido al apoyo limitado, se decanta por elevar un santuario nacional en la zona, equiparando la zona al Monte de la Justicia o al Montes de las Artes, creando un Monte de la Misericordia.
El rey deseaba una iglesia similar a la del Sagrado Corazón de Montmartre (París). A lo largo de la historia y debido a los acontecimientos históricos, el arquitecto principal del proyecto cambia de manos varias veces. Al final, se convierte en la 5ª iglesia más grande del mundo.
Además, os recomiendo pasar por los museos que alberga en su interior: el Museo de Arte Religioso Moderno y el Museo de las Hermanas Negras. Aunque lo que más me apasionó fue su vista panorámica!