Se está acabando el mes y, lo que se avecina, es una maravilla. Pero todo pasa tan deprisa que, miro atrás y parece que fue ayer la primera vez que veía una puesta de sol sobre el Mont des Arts; bajaba hasta la Grand-Place, callejeando y atesorando en mi memoria cada pequeña tienda artesanal que encontraba a mi paso, por si algún día quería volver; me maravillaba con las fachadas de las antiguas casas gremiales y continuaba hasta la Plaza de la Bolsa, por la rue au Berre, dejándome llevar por el aroma a chocolate; me sentaba en las escaleras de la plaza a escuchar algún músico underground como si fuera un concierto privado y me deleitaba con la música y un buen té caliente entre manos. He repetido este recorrido, por lo menos, una vez a la semana, desde que llegué. Y pocas, me parecen…
Os invito a disfrutarlo, en vuestra visita a Bruselas y espero que tenga el mismo efecto mágico en vosotros, que conmigo.
Que tengáis una semana genial y, los que ya tengáis mercadillo navideño en vuestras ciudades, espero que lo estéis disfrutando al máximo. ¡El viernes me toca a mí! Estad atentos de nuestras redes, para no perderos ningún detalle.
¡Nos vemos!