Desde el momento en el que llegues a Lovaina – o cualquier ciudad belga universitaria – seguro que oirás hablar con entusiasmo de los cantuses. Se tratan de una fiesta muy anclada en la tradición universitaria, tanto, que continúa albergando reglas y fórmulas en latín. Además es una forma perfecta para conocer a gente nueva y relacionarse con belgas.
En Lovaina los organizan las asociaciones de estudiantes de cada facultad en sus Fakbars – bares propios de las facultades – y son un evento al que nadie quiere faltar. Al principio nos resultará algo raro, diferente respecto a una fiesta al uso, incluso algo difícil. Esto es porque contempla reglas que debemos cumplir si no queremos ser castigados con retos de lo más divertido, todo ello en un ambiente constante de canciones y cervezas.
La fiesta está presidida por el Presídium, compuesto por el Senior, que se encarga de controlar a los asistentes y vigilar el cumplimiento de normas, un Castigador, que se encarga de imponer retos a aquellos que hayan incumplido una regla, y el Cantor, cuyo cometido es iniciar las canciones que todo el mundo entona al unísono.
Entre las reglas, que pueden variar, encontramos algunas como no aplaudir, no usar el teléfono móvil, una fórmula para retar a alguien a beberse su cerveza de un trago, o incluso el volver a casa sano y salvo. Entre canción y canción, y regla y regla, la Stella Artois no deja de correr y comienzan a sucederse las peticiones para ir al baño: cosa que no podrás hacer sin pasar por una prueba que decide el Castigador. Puede que sea algún reto cómico que rompe el hielo entre los invitados o quizá tengas que escribir un poema de rima AABBAA o ABABA… Sin duda cualquiera puede pasar unas horas desternillantes y muy entretenidas en este tipo de fiestas, y es algo que no se puede dejar pasar en una experiencia Erasmus.
¡Prosit Senior, Prosit Corona, Ad fundum!
