Si compartís hobbies conmigo y os encanta comer fuera, es probable al principio de llegar aquí pensarais que ya no podéis salir todos los fines de semana. Claro, cada comida o cena cuesta más que en España, pero tampoco hay que renunciar a ello, según el presupuesto os podéis adaptar. Además, si vienen vuestros padres, parejas o amigos, no viene nada mal conocer unos cuantos restaurantes para una cena más especial.
Comidas
Como sabréis, lo habitual (y más si estás haciendo turismo) es comprar una ensalada o bocadillo para llevar, o comerlo sentado, pero sin alargar la sobremesa. Encontraréis buenos precios en Panos, ofrecen mucha variedad y calientan los sándwiches, baguettes y croissants antes de que te los lleves. Otras cadenas como Paul dan un servicio similar. Lo mejor de es que están por toda la ciudad, encontraréis estos locales en estaciones de tren y calles turísticas.
Para las cenas, el abanico se amplía: gastronomía belga, francesa, italiana, mexicana… por no hablar de la variedad de restaurantes que sirven comida asiática, ya sea de Tailandia, Pakistán, India, China o Japón. Además, prácticamente todos los lugares de esta lista tienen página web para reservar, así no se os pasará la hora ni os quedaréis sin mesa.
Cenas italianas
Si buscáis algo barato, entonces Nona (rue Sainte-Catherine) es para vosotros, aunque tendréis que elegir porque tienen 2 locales separados para pizza y pasta. Y si os apetece gastar más, en restaurantes como A l’Angolo (rue du Marché aux Poulets) podréis cenar en un ambiente elegante por una cantidad bastante razonable.
Cenas francesas
En Les Fondus de la Raclette (place de la Vieille Halle aux Blés), degustaréis fondues de todo tipo (queso, carne etc), raclettes… El sitio resulta bastante cálido, tanto por la decoración como por la amabilidad del personal, además del calor que desprenden los fogones. No os voy a mentir, barato no es, pero vale la pena.
Cenas con mucha carne
Si sois amantes de la carne y las hamburguesas, también tengo algo para vosotros. En Midtown Grill (rue Paul Delvaux) sirven carne excelente, ¡incluidos tomahawks de 1kg! Eso sí, el precio por persona se eleva hasta los 30-35€. Una opción más asequible es el Be Burger, detrás de Sainte Catherine, donde saldréis por 15-20€ considerando hamburguesa y bebida. Los acompañantes se piden y pagan aparte: os recomiendo las patatas, que se pueden tomar con la salsa que quieras y están deliciosas aquí.
Cenas locales
No me olvido de la gastronomía típica belga, presente por toda la ciudad. Imprescindible investigar antes si no queréis caer en «trampas» para turistas. Grimbergen Café sirve especialidades nacionales, entre ellas platos de carne y las renombradas moules frites. La iluminación y decoración interiores hacen del local un lugar agradable donde cenar y aunque la comida tampoco sorprende, sí cumple las expectativas.
Cenas japonesas
Por último, si os encanta el sushi, os regalo mi mejor descubrimiento de estos días: el restaurante Anata en boulevard Anspach. Los precios rondan los de España, así que pagaréis seguramente menos de 20€. Aunque desde fuera no llama la atención, dentro resultan muy curiosos sus pisos y tipos de mesas… Podréis pedir hasta “barcos” repletos de sushi, que se sirven envueltos de vapor de agua.
Y si vais más justos de dinero, siempre tenéis la cadena Makisu, con ofertas de sushi y poké para llevar por unos 10€.
Eso es todo de momento, os dejo libres porque seguro que ya tenéis hambre…
¡Nos leemos pronto!
Me presento, me llamo Julio Yustas, tengo 23 años y voy a ser parte del equipo de corresponsales que, durante el próximo semestre, va a intentar que disfrutéis de Flandes al menos tanto como nosotros.
Vengo de Valencia, donde estudio el Máster de Ingeniería Industrial en la Universitat Politècnica de València. Durante los dos próximos años, disfrutaré de Bruselas gracias a un acuerdo de doble titulación por el que estudiaré el Máster en Ingeniería Electromecánica en la Université Libre de Bruxelles (ULB).
Me considero una persona bastante proactiva y es difícil que no me encontréis embarcado en alguno de mis múltiples proyectos. Mi tiempo libre lo dedico principalmente a pasar tiempo con mis amigos, viajar, la fotografía y la cocina.