Goedemorgen desde Bruselas. Si alguna vez has ido a Bois de la Cambre, ya sea para hacer un poco de ejercicio, dar un tranquilo paseo o pasar el rato rodeado de naturaleza, te habrá llamado la atención la cabaña que se encuentra en el centro del lago. Esta cabaña es un pequeño restaurante al cual solo se puede acceder a través de una barca, y lo siento por las niñas bonitas pero aquí pagan dinero.
Su situación es ideal para disfrutar de un buen chocolate caliente y una merienda en una choza cálida rodeado de la naturaleza que ofrece Bois de la Cambre entre semana o fin de semana para dejar a un lado la vida metropolitana de la ciudad de Bruselas.
Se trata de un sitio de lujo y los precios, como es de esperar, son elevados. Sin embargo el elegante trato, las maravillosas vistas y los grandes postres y tazas de té (que parece que no acaba nunca) hacen que el balance calidad-precio sea muy bueno. Es un sitio al cual hay que ir al menos una tarde, alguna celebración especial o para sorprender en una primera cita.