Si estás por el centro de Bruselas y quieres comer comida típica, este es tu sitio. No te voy a engañar, es un sitio muy turístico pero su ubicación, decoración y calidad hacen que merezca la pena pararte.
HISTORIA DE CHEZ LÉON
Se encuentra en pleno centro (Rue des Bouchers 18, 1000 Bruxelles, Bélgica) y su historia comenzó en 1893, cuando Léon Vanlacker inauguró “Friture Léon” a pocos pasos de la Grand Place. Este pequeño establecimiento tan solo tenía 5 mesas pero fue ganando popularidad rápidamente.
El verdadero auge de Chez Léon llegó en 1958, coincidiendo con la Exposición Universal de Bruselas. Durante este evento internacional, la ciudad se consolidó como la capital indiscutible de los “moules-frites” (mejillones con patatas fritas), y Chez Léon se posicionó como uno de los lugares predilectos para degustar este plato emblemático.
Actualmente el restaurante ocupa 9 edificios y tiene una capacidad de 495 personas.
MI EXPERIENCIA
Hace unos días decidí visitar este restaurante y mereció totalmente la pena.
Para empezar os voy a decir lo que yo pedí:
- Spaghetti Léon: llevaban nata, mejillones, champiñones, gambas y camarones
- Carbonnades flamande à la bière: muy parecida a la carrillada española pero con cerveza en lugar de vino
- Mejillones gratinados: un completo espectáculo, no me gustan los mejillones pero decidí darles la oportunidad y acerté por completo.
Os animo a ver el vídeo para ver los platos que me sirvieron y si tenéis la oportunidad, pasaros por allí. Además, el restaurante está decorado con estatuas y simbología de Bélgica.

¡Hola! Soy Lucía Romero, tengo 21 años y estudio Traducción e Interpretación en Sevilla. Este año estoy haciendo mi Erasmus en Amberes y durante el segundo cuatrimestre del curso 2024-2025 seré la nueva corresponsal de PRODUCTOS BELGAS.
Me apasiona la gastronomía, así que durante los próximos meses os llevaré conmigo a descubrir los platos más típicos de Flandes y os enseñaré a prepararlos en casa.
¡Hasta pronto!