Por desgracia, hoy en día algunas actividades culturales como ir al cine no están al alcance de todos o han quedado relegadas a ocasiones especiales por los elevados precios de las entradas. Sin embargo, ir al cine en un país extranjero, sobre todo si estás aprendiendo idiomas, puede ser una experiencia de lo más enriquecedora. Si a esto le sumas el multilingüismo de Bélgica, la cosa se pone aún interesante. Hoy os cuento mi experiencia con el cine en Flandes.
Este fin de semana queríamos ver una película, The Revenant (tranquilos, no spoilers) pero nos apetecía verla a lo grande. Decidimos darnos un capricho e ir al cine, concretamente al UGC. De todos los cines de Amberes, quizá el UGC es el mejor en cuanto a instalaciones y localización se refiere (Van Ertbornstraat 17, muy cerca de la Estación Central). Una de las diferencias de España con respecto a la mayoría de países europeos en lo que a películas se refiere es el tema del doblaje. España junto con países como Italia, tienen una gran tradición de doblaje, que se ha establecido como una industria más. Todas las películas proyectadas están dobladas, salvo en algunas proyecciones especiales en versión original. Sin embargo, en Amberes, al menos en el UGC, todas las películas proyectadas están en versión original con subtítulos en francés y neerlandés. Así, al ver The Revenant (versión original en inglés), teníamos a nuestra disposición tres lenguas al mismo tiempo: inglés en audio y francés y neerlandés en subtítulos. Ahí es nada.
Las instalaciones del UGC me sorprendieron: varias plantas con salitas de espera y una decoración de estilo moderno que llama la atención (como el túnel estrellado de las escaleras mecánicas). Los precios de las entradas oscilan entre los 8 y 9 euros, mucho más barato si compras un bono (30 euros, 5 entradas) junto con tu tarjeta de estudiante. Puedes compartir el bono con amigos.
CONSEJO: tras los incidentes en Bruselas, se ha aplicado temporalmente una nueva política que prohíbe la entrada al cine con mochila. De esta manera, es mejor que llevéis bolsos de mano o riñoneras, pero bajo ningún concepto mochilas. Tampoco podéis dejar la mochila en taquilla (como es lógico). Son muy estrictos al respecto (a nosotras casi nos cuesta quedarnos fuera).
Soy Marina y desde hoy hasta junio soy la corresponsal de este blog en la ciudad de Amberes. Estudio Lenguas Modernas, Cultura y Comunicación en inglés y alemán en la UAM . Tal vez no lo sepáis, pero tanto el inglés como el alemán tienen una hermana no tan agraciada actualmente: el neerlandés. Por lo tanto, si sabes inglés y, especialmente, alemán ya tienes mucho camino recorrido en el aprendizaje de esta lengua (con nada más y nada menos que 38 millones de hablantes). Con lo cual, aprender neerlandés resulta una oportunidad difícil de desperdiciar (la típica oferta 3×2).
Por otro lado, resulta casi imposible evitar admirar la belleza de Flandes y sus ciudades portuarias, que nos dejan estampas dignas de ilustrar postales de Navidad. Paseas por Amberes y degustas de manera gratuita infinidad de sabores y matices del arte: el arte religioso y mitológico, el arte gastronómico, el arte moderno, el arte de la aristocracia, el arte de la moda e incluso el arte industrial.