En los tiempos que corren, parece imposible que en un restaurante te sirvan aquellos huevos de clara concentrada y yema abundante del cortijo de los abuelos, las olivas o tomates recolectados manualmente y cultivados a base de productos naturales, lejanos de químicos y fertilizantes, o incluso el sabroso jamón o morcilla de los cerdos criados en el pueblo.
Parece imposible hasta que uno se percata de que en una ciudad sostenible, ecológica y preocupada tanto por la alimentación de sus ciudadanos como por el cambio climático, como es Gante, más de un restaurante debía tener una filosofía basada en que nuestro cuerpo no necesita nada más que aquello que nos aporta la naturaleza.
Así es Le Petit Botanique, un pequeño y acogedor café-restaurante con una clara misión: mostrar a sus comensales que es posible comer sano y rico a base de lo que la tierra o el mar nos da en cada época del año. ¿Y cuál es el menú entonces? Depende, si las zanahorias están listas para la cacerola, no faltará un puré de colores anaranjados. Cuando llega el turno a los mejillones, allí nos esperará el plato belga por excelencia a base de los mejores mejillones de la temporada y elaborado con el mayor cariño del mundo. Y así sucesivamente, usando aquello que corresponde, todo en su justo momento y extraído del huerto que ellos mismos poseen y trabajan, unos cultivos localizados en la misma ciudad de Gante.
Pero Le Petit Botanique no solo centra sus esfuerzos en una mejor alimentación, sino que también destaca por su compromiso social y medioambiental contratando a parados de larga duración o personas con dificultades de inserción laboral para las labores agrícolas y hosteleras. Además, cada cubierto, plato, mesa, silla o vaso que encuentres en el comedor proceden de tiendas de segunda mano o mercadillos, contribuyendo así a la reutilización y renunciando a las toneladas de basura que genera el humano año tras año.
Cabe mencionar que Le Petit Botanique incluye en su menú tanto carne como pescado acorde con el objetivo del negocio: renunciar a los productos con conservantes, colorantes o modificaciones genéticas para servir al cliente platos a base de ingredientes naturales y locales. Con este fin, los viernes el menú se basa en el pescado traído directamente del mercado de Vrijdagmarkt, mientras que la carne es comprada en carnicerías donde se aseguran de la libertad de los animales y su alimentación saludable.
Precio:
14€ el plato, aunque depende del día
Horario:
De lunes a viernes: de 11 h a 21 h
Sábados: de 10 h a 18 h
Domingos cerrado
Reservas
Mediante su página web, pinchando aquí.
Si queréis comer como en casa, no dudéis en probar Le Petit Botanique en el número 19 de Kammerstraat, un rincón de Gante donde la cocina local y de calidad son los protagonistas.