¡Bienvenido marzo!
Qué rápido pasa el tiempo, parece que fue ayer cuando pisé por primera vez suelo belga y ya ha pasado más de un mes. Ojalá el tiempo pasase más despacio.
Lo bueno es que ya está llegando la primavera, y los planes que se pueden hacer se multiplican. Además, últimamente hemos tenido la suerte de tener muy buen tiempo, cosa bastante extraña durante esta época del año en Bélgica.
Y para disfrutar del buen tiempo me apetecía dar un paseo en bici, algo que no había hecho por aquí hasta entonces y que como ya sabemos es de lo más típico.
El día que me decidí a alquilar una bici tuve que volverme a la residencia porque no conseguí dar con ello. Tras investigar he conseguido dar con ello y os lo voy a explicar para que no os pase lo mismo que a mí.
Hay muchas formas de alquilar una bicicleta en Bruselas, pero si solo vas a utilizarla un día, como era mi caso, lo más sencillo es coger una bicicleta de las que hay aparcadas por toda la ciudad. Estas bicicletas son de la empresa Villo!, y hay muchísimas, así que seguro que tienes algunas cerca de ti.
Lo primero que tienes que hacer es descargarte la aplicación móvil Villo! Officiel (hay muchas otras con nombres parecidos pero no servirán) y registrarte. Una vez ya estés registrado, accedes a “my profile” desde la esquina superior izquierda e introduces tu tarjeta en “my payment information”. Lo siguiente será ir a “subscription options” desde el mismo menú de la esquina superior izquierda. Ahí vas a encontrar todos los diferentes planes de alquiler: un día, una semana, un mes… Yo opté por el de solo un día: “time to time”. Esta opción son: los primeros 30 minutos gratis, la siguiente media hora 0,5€, la siguiente media hora 1€ y de ahí en adelante 2€ la hora. Para que os hagáis una idea, yo estuve con ella durante unas dos horas y fueron 5€.
Una vez seleccionas el plan que quieres, introduces el momento en el que quieres comenzar a hacer uso de tu pase, aceptas la política de privacidad y ya accedes al pago con la tarjeta que habías introducido al principio.
Ya tienes comprado el pase. Ahora tienes que desplazarte al lugar desde el cual quieres coger la bici. Si no sabes donde hay puedes acceder al mapa desde el menú y ver cual es el punto más cercano a ti y el número de bicicletas disponibles.
Una vez llegues al punto, te acercas a la bicicleta que quieras (comprueba que las ruedas no están pinchadas y que el sillín te viene bien), accedes al menú desde la aplicación y vas a “my subscriptions” donde tendrás el pase que hayas comprado. Le das a “release my bike” e inmediatamente al botón verde que se encuentra al lado de tu bicicleta seleccionada. Entonces la bicicleta se desbloqueará y la podrás sacar del aparcamiento.
¡Ahora ya solo queda disfrutar! Yo opté por dar un paseo por el Bois de la Cambre, uno de los parques más grandes y populares de Bruselas, con parte de carretera, caminos entre los árboles, puentes, lago…una maravilla.
Para devolver la bici lo único que tienes que hacer el acercarte a un aparcamiento con huecos disponibles (también lo puedes ver desde el mapa de la app) y volver a encajar la bici. Verás que la luz se pone naranja y luego verde. Para comprobar que está todo bien, metete en la aplicación y te indicará que tu viaje a finalizado y el coste final del mismo.
¡Ya no tenéis excusa para iros de Bruselas sin dar un paseo en bici!
Soy de Madrid y estudio tercero de ADE+Marketing en la Universidad Francisco de Vitoria. En Bruselas estudio en ICHEC.
Llevo tan solo 5 días en Bruselas y ya está siendo una experiencia increíble. Ya he conocido los lugares más famosos y representativos de la ciudad, y he conocido a muchísima gente con la que estoy disfrutando un montón. Ya estoy enamorada de sus calles, de sus parques, de su arquitectura, ¡de su gastronomía… ¡No puedo esperar a ver todo lo que queda por llegar!
¿Por qué Bélgica? Yo elegí Bélgica principalmente porque quería mejorar el francés, y la ventaja que tiene Bélgica es que está en el centro de Europa Occidental, y cuando el COVID lo permita se puede llegar rápidamente y muy barato (ya que el transporte público tiene un precio muy asequible) a países como Holanda, Francia, Luxemburgo o Alemania. Además, dentro de Bélgica ya hay mil ciudades increíbles que visitar como Brujas, Amberes, Gante, Lovaina… y al ser un país pequeño no tardas nada en ir de un sitio a otro. De momento no he tenido la oportunidad de visitar Bélgica más allá de Bruselas, pero lo estoy deseando.