Un edificio venido del futuro donde puedes tomar algo, leer, encontrar tecnología punta, empaparte de cultura belga, estudiar e incluso tocar un piano de cola de manera silenciosa. Si visitas Gante, mi consejo es que no se te quede pendiente.
De Krook es el edificio que conecta el centro histórico de la ciudad con el Barrio de las Artes. Su arquitectura llama mucho la atención y se ha llevado algún que otro premio, tal como relata este otro post. Son diferentes instituciones las que colaboran ofreciendo sus servicios allí, lo que le da su cualidad multiusos. Por un lado es una biblioteca y por otro, el Imec (Centro de investigación de Flandes de nano electrónica y tecnologías digitales), la Universidad de Gante y Urgent.fm comparten espacios.
A pesar de su gran funcionalidad y de haberse convertido en un símbolo de la ciudad, no todos los ganteses están contentos con el edificio. Esto se debe a su osado look, que según algunos contrasta de manera demasiado agresiva con la arquitectura tradicional de los alrededores. Por si fuera poco, el exterior no es lo único que cautiva. Al cruzar la puerta principal, te topas con un ambiente cálido distribuido en 7 pisos y con un diseño también atrevido y vanguardista. Por si os interesa saber qué se puede encontrar en cada planta, aquí os dejo la información.
También a destacar, uno de los puntos fuertes de De Krook son las vistas de la ciudad que se pueden admirar desde sus ventanas. Estudiar, leer o simplemente relajarse en este lugar es todo un privilegio para los ojos.
En definitiva, De Krook no solo es una cara bonita. Tiene mucho que ofrecer, tanto como quieras coger.
OS ESPERO EN EL PRÓXIMO POST: Rosa Merckx, la primera maestra cervecera de Bélgica
Os invito a este extraño lugar. Aunque las visitas no son frecuentes, haremos de esta ocasión la excepción que confirma la regla. Bienvenidos a mi cabeza.
Seguidme, os llevaré a un sitio muy especial. Normalmente, tras esta puerta pintada de colores, uno puede toparse con espaguetis flotantes, junglas de pingüinos o ciudades invisibles… A decir verdad, la mayoría de las veces, ni siquiera yo mismo estoy seguro de lo que me espera al girar el pomo. De todas formas, hoy podéis estar tranquilos. Hoy sí sé lo que hay al otro lado:
Al otro lado está Gante. Y sus calles adoquinadas, clones en bici, música abstracta, dinosaurios, idiomas alienígenas, hechizos y, dentro de esta normalidad, infinidad de locuras.
Lo más seguro es que si os dejase sueltos por este lugar, acabaríais majaras. Como no queremos eso, os lo voy a enseñar poco a poco, durante cinco meses.