Cuando pensábamos en una palabra para definir a Lovaina lo primero que nos venía a la cabeza era cerveza y estudiantes. Pero si de lo que se trata es de escoger una imagen para definirla, sin duda lo primero que nos viene es Grote Markt y el espectacular ayuntamiento de Lovaina, uno de los ayuntamientos góticos más conocidos del mundo.
La primera piedra de este edificio fue colocada el año 1439 en los sótanos de las casas que por aquél entonces existían allí (servían como casa para los regidores). Ahora estas casas han sido restauradas y se puede acceder a ellas por una puerta del lateral izquierdo. Pero si hay alguna cosa que capta la atención, no hay duda de que son las 236 estatuas que conforman los nichos del ayuntamiento, que no fueron colocados allí hasta 1850 (gracias al escritor francés Victor Hugo). Desde eruditos, a condes y duques, pasando por figuras bíblicas, todos ellos adornan esta fachada, ¿reconoces alguno?
La construcción del edificio duró 30 años y fue dirigida por tres arquitectos diferentes. Afortunadamente, el ayuntamiento consiguió escapar del gran incendio que ocurrió en la ciudad durante la Primera Guerra Mundial (recordemos que la Biblioteca Central no tuvo tanta suerte…) y en la Segunda Guerra Mundial una bomba rozó la fachada pero sin causar grandes desperfectos en el edificio.
Las escaleras barrocas que presiden la entrada datan de 1709, y nada más entrar en el ayuntamiento, nos reciben en el vestíbulo las banderas de importantes familias históricas de la ciudad. Recordemos que fuera colgaban las cuatro banderas de los municipios que conforman Lovaina desde el año 1976: Kessel-Lo, Heverlee y Wijgmaal (junto con la blanquirroja de Lovaina) y la bandera europea.
Adentrándonos en el edificio descubrimos retratos de todos los alcaldes que han gobernado la ciudad desde 1970 y cuadros y tablas de conocidos artistas (como Pierre-Joseph Verhaghen o Otto van Veen). Y ya para terminar la visita, acabamos en la sala gótica, donde antiguamente se organizaban las fiestas y recepciones oficiales y dónde actualmente aun se reúne la corporación municipal de Lovaina (pese a haberse trasladado casi todos los servicios municipales a la nueva oficina municipal).