Lovaina es considerada una ciudad pequeña que contiene mucho encanto especial, pero en mi opinión lo más bonito que tiene, es el Gran Beguinaje. Al entrar en este barrio parece que realices un viaje temporal hacia al pasado medieval. Lo primero que se ve al entrar al barrio a la izquierda es su pequeña basílica gótica del 1305 que junto a las casas de ladrillo rojizo te inunda en una atmósfera casi sacada de cuentos de fantasía.
El Groot Begijnhof como se diría en Neerlandés, cuenta con aproximadamente unas 100 casas, jardines y varios canales por los que pasa el Río Dijle. Este barrio fue construido en el siglo XIII con la finalidad de que las beatas residieran juntas en un mismo lugar. Pero, ¿Qué son las beatas? Son mujeres solteras y piadosas que realizaban voto de castidad,sin llegar a ser monjas que vivían en estos beaterios o ya fuese solas. Dedicaban sus vidas a cuidar de enfermos o a labores manuales, pero sin pedir limosnas. Como dato curioso cabe destacar que la última beata de Lovaina falleció en el año 1988.
Tras esto, en el siglo XX se comenzaron las reconstrucciones del barrio para se le diera un nuevo uso debido a estaba comenzando a ser abandonado. Actualmente el beaterio de usa como residencia de estudiantes y profesores, extranjeros o de intercambio. En el año 1998 fue considerado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad.
Personalmente creo que es una visita obligatoria si vas Lovaina porque estas calles captan toda la esencia histórica de la ciudad, puedes visitarlo en cualquier momento del día porque está abierto a visitantes. Espero que os haya gustado, teneis todas las fotos del Gran Beaterio en nuestro flicker: