Ese moderno y extraño edificio que encontramos a la derecha es el nuevo Stadshal, es decir, el nuevo ayuntamiento de Gante. Se encuentra en la plaza Emile Braun y es obra de dos arquitectos flamencos, Robbrecht y Daem, quienes ya fueron parte de polémica por la sala de conciertos que diseñaron para la ciudad de Brujas (ver aquí).
Mide 40 metros de largo y 20 de alto, tiene hasta 1600 pequeñas ventanas repartidas por todo el tejado, dos ascensores y posee más la estructura de un tejado que de un edificio. Se inauguró su apertura el 1 de septiembre de este pasado año 2012 y ya es foco de múltiples críticas. Hay quien lo adora y hay quien lo odia, y no es para menos, pues su situación desentona un poco con los dos edificios que tiene alrededor, la Iglesia de San Nicolás por un lado y la torre Belfort por el otro, ambos de la Edad Media. De hecho, incluso la UNESCO reprendió que el Parlamento flamenco no avisara de tan radical cambio en un entorno tan histórico.
Esta construcción forma parte del proyecto Kobra, un proyecto que se dedica a restaurar y reconstruir edificios y plazas de la ciudad. Aunque dicen que aún faltan cosas por terminar, este nuevo edificio por visitar en Gante ya ha recibido el nombre de “Establo de Ovejas” por su aspecto (hasta se colocaron dos ovejas reales durante su construcción). Al parecer será un lugar de reunión donde se organicen eventos como conciertos, exposiciones o mercados.
Soy Cristina López, estudiante de último año de psicología en Barcelona y ahora corresponsal de Gante, mi ciudad destino de Erasmus. ¿Mis primeras impresiones de Gante?
Han habido muchísimas cosas aquí que me han llamado la atención, como que en ocasiones un agua te salga más cara que una cerveza, que en las terrazas de algunos restaurantes te pongan mantas por si hace frío, que en todos los lavabos haya papel (incluso en los lavabos portátiles que ponen en los festivales), que a veces tengas que pagar para ir, que duerman con almohadas cuadradas, que sólo se den un beso en la mejilla al saludarse, o su predilección por el picante, ya sea poniéndose pimienta en la sopa o tabasco en los spaghetti.
Gante es una ciudad que combina tradición y progreso. Hoy en día es considerada una ciudad de estudiantes, hay alrededor de 45000, así que eso significa que, además de su belleza y su aire medieval con multitud de construcciones y calles que visitar y recorrer, es una ciudad joven y activa, constantemente en movimiento. Siempre encuentras algo que hacer, algún evento, festival o exposición que te pueda ser de interés.
A lo largo de mi actividad en este blog os iré mostrando todo lo interesante y curioso que viva durante mi estancia Erasmus, de momento espero que esta pequeña introducción os haya picado la curiosidad para seguir visitándonos y, quién sabe, ¡quizás veniros! Así que por si eso sucede, mi primer consejo es que os alquiléis una bicicleta, no es una ciudad muy grande y se puede recorrer a pie fácilmente, ¡pero no hay nada mejor que sentirse un auténtico belga! Y mi primera advertencia si vais en bici es que tengáis mucho cuidado con las vías del tranvía, ¡y más si llueve!