¡Dentro de poco ya estaremos en plena época llena de festividades! Las tradiciones varían según el país o incluso entre diferentes ciudades. Esta costumbre que os vengo a contar no tiene relación con la Navidad, pero es todo un acontecimiento en Bélgica. Hoy os vengo a contar que el San Nicolás belga viene de España.
Historia
Cuenta la historia que San Nicolás va acompañado de Pedro el Negro, su ayudante. A pesar de que el personaje histórico de San Nicolás proviniese de Turquía, el San Nicolás belga viene de España. Se cuenta que viene de Madrid o de Alicante y que se desplaza en un caballo blanco para repartir los regalos. Además, San Nicolás lleva una tupida barba blanca, va vestido de rojo y lleva un bastón. Desde luego que la primera vez que escuché que San Nicolás venía de España, no daba crédito, pero después pude comprenderlo. Resulta que por aquel entonces, Bari, la ciudad donde murió, pertenecía al Imperio Español. Por eso se generó esta confusión y se pensó que San Nicolás venía de España, aunque realmente nunca pisó la península.
Noche de San Nicolás
La noche del 5 al 6 de diciembre se celebra San Nicolás o en flamenco Sinterklaas. El nombre de San Nicolás puede que os suene, ya que también es celebrado en otros países como Alemania, Francia o los Países Bajos. La figura de San Nicolás viene en realidad de San Nicolás de Bari, un obispo nacido en Turquía en el siglo III y patrón de los niños. En esta noche especial, San Nicolás trae regalos a los niños que se han portado bien.
En muchas ciudades se empieza a celebrar este día con un desfile para que los niños disfruten de poder ver a San Nicolás. Después, durante la noche del 5 al 6 de diciembre, San Nicolás reparte los regalos a los niños que se han portado bien, pero no lo hace solo. Cuenta con la ayuda de Pedro el Negro o en flamenco Zwarte Pieten, un personaje del que solo se tiene constancia desde el siglo XIX. Pedro el Negro tiene los labios rojos y la cara pintada de negro, debido al hollín de las chimeneas. A lo largo de toda la noche son capaces de repartir todos los regalos a los niños buenos. Sin embargo, a los niños que se portan mal les reparten unas ramas de árbol y se los llevan de vuelta a España.
La mañana siguiente los niños se despiertan con inquietud, para descubrir si San Nicolás les ha traído lo que ellos querían. Se trata de un día para pasarlo rodeado de seres queridos comiendo platos típicos y disfrutando de la compañía. Espero que esta historia os haya parecido igual de curiosa que a mí.
Me despido hasta el próximo post,
Un saludo,
Elena Pascual
Soy corresponsal de Patrimonio durante el primer cuatrimestre del curso 2023-2024. Vengo de Alicante y actualmente estoy haciendo durante todo el curso mi erasmus, estudiando Arquitectura en la KULeuven en Bruselas.
Entre mis aficiones está sobre todo cocinar y cualquier cosa relacionada con la gastronomía o visitar nuevos lugares.