Últimamente hemos hablado de algunas de las abadías de Lovaina, en concreto de la abadía de Santa Gertrudis y la de Keizersberg. Pero en Lovaina hay dos más: la del Parque (de la cual nos habló nuestro anterior corresponsal) y la de Vlierbeek. Lo que hoy os propongo es visitarlas todas en bicicleta. ¿Quizá demasiado para un día? Bueno, pues repártelo en dos.
Salimos de Grote Markt, cogemos Mechelsestraat, pedaleamos un rato y vigilamos a nuestra derecha para girar en Halfmaartstraat (en teoría ya veréis la Abadía de Santa Gertrudis) ¡Y aquí está nuestra primera parada! (¡No te olvides de visitar el Pequeño Beaterio!).
Continuemos. Volvamos a Mechelsestraat y sigamos hacia arriba. Veréis que la cuesta empieza a ser pronunciada y tal vez tengáis que bajar de las bicis. Estamos subiendo la colina donde nos espera la Abadía de Keizersberg y la magnífica vista de Lovaina.
Una vez visto, podemos continuar. Bajamos otra vez la cuesta y giramos la primera calle a la izquierda, por Burchtstraat, todo recto hasta que salgáis del anillo, donde tendréis que coger la calle Redersstraat hacía abajo (dirección la estación). La calle cambiará a Vuurkruisenlaan, continuáis siguiendo la calle por Brugbergpad (sí, nos estamos alejando, pero vamos dirección Kessel-Lo, y os aseguro que merece la pena). Simplemente tenéis que ir siguiendo el carril bici y tarde o temprano veréis el parque, aquí podéis aprovechar para comer, relajaros y pasar un buen rato. ¡Quizá también podéis cambiar un rato la bicicleta por una barquita del largo!
Si queréis terminar de verlo todo, salís del parque y por atrás, cogiendo Vijverlaan, y Kloosterdijkpad llegaréis a la Abadía de Vlierbeek. En este punto también hay un restaurante con mesitas en el exterior donde podéis sentaros a tomar una cerveza y recargar las pilas para llegar a nuestro último destino.
Ahora toca rehacer parte del camino y volver a la estación. Desde ahí seguimos por el anillo hacía abajo y cuando veáis a vuestra izquierda Tiensesteenweg giráis, bajáis por Tivolistraat, luego Parweg y ¡habréis llegado a la Abadía del Parque!
¿Os ha parecido complicado? Quizás un poco con tantas calles, pero ya os digo que con la ayuda de un mapa esto es pan comido. ¿Preparados para empezar a pedalear?