Una de las ventajas de vivir en Bruselas es que en nada de tiempo y por muy poco dinero te plantas en otra de las maravillosas ciudades de Bélgica en las que puedes pasar un muy buen día. Y una de estas ciudades es Gante, Ghent, Gand, de la que os voy a hablar hoy.
Lo primero que tenéis que saber es que si no tenéis un Go-pass (50 euros 10 viajes en Bélgica) el tren es más barato los fines de semana (aunque pueda parecer raro, así es), por lo que en fin de semana ir y volver a Gante cuesta solo 10 euros, y el viaje es poco más de media hora (hay otros trenes que tienen más paradas que tardan una hora, así que prestad atención a esto cuando saquéis el billete).
Llegaréis a la estación de Sint-Pieters, muy bonita aunque está un poco alejada del centro. Yo recomiendo ir dando un paseo hasta el centro, de camino te encontrarás un parque enorme, muy cuidado, con estatuas y alguna que otra cosa más, y en nada llegas a los famosos canales de Gante, por donde dar un paseo muy agradable hasta el mismo centro.
Además, si vais un domingo, os encontraréis con este mercadillo de libros de segunda mano en el lado izquierdo del río. Es muy grande, y aunque muchos libros son en flamenco, hay muchos en francés, inglés e incluso podéis encontrar alguno en español.
Y finalmente llegáis al centro. Es como entrar en un cuento ambientado en la Edad Media, mires para donde mires es todo precioso.
De todos los edificios, destaca la catedral, Sint Baafskathedraal. La entrada es gratuita, y merece mucho la pena porque es impresionante. En ella se encuentra el retablo pintado por Van Eyck La adoración del Cordero Místico, sobre el que hay una leyenda muy interesante que podéis leer aquí. Sin embargo, para ver el original hay que pagar 4 euros.
Otro de los rincones de Gante que recomiendo es la calle del graffiti. Es una calle que habilitó el ayuntamiento de Gante para poder pintar graffitis de forma legal en la ciudad. No es muy grande, así que os podéis imaginar cómo está: llena de graffitis desde el suelo hasta el techo, se superponen los unos a los otros… Una auténtica muestra de arte urbano en pleno centro histórico de la ciudad.
Para comer, si hace buen tiempo, recomiendo un puesto de comida rápida que está por esta zona. Lo reconoceréis por las colas que se forman siempre. Es bastante barato, y sus frites son imprescindibles: las mejores que he comido en toda Bélgica hasta ahora.
Para terminar, al otro lado del río hay un castillo medieval que merece la pena visitar. Si tienes menos de 19 años es gratis, y hasta 26 son seis euros. Está muy bien conservado, algunas partes restauradas, y tienes un tour para ir siguiéndolo con explicaciones y exposiciones de armas medievales o de herramientas de tortura reales que se utilizaban en aquella época.
Estos son algunos de los rincones que no os podéis perder de Gante, pero lo más bonito de la ciudad sin duda es perderte por sus callejuelas y disfrutar de la tranquilidad de esta pequeña ciudad flamenca.
En resumen: si estás en Bruselas Gante es una escapada obligatoria para pasar un día estupendo y conocer mejor la parte flamenca de Bélgica.
À bientôt!
Soy María Ballesteros, vuestra nueva corresponsal en Bruselas. Estudiaré cuarto de Traducción e Interpretación en la Haute École Francisco Ferrer (HEFF) hasta (mínimo) febrero. El amor de mi vida son los viajes, y por eso hace un año más o menos decidí que quería pasar una buena temporada fuera de España, conocer otro país y gente nueva y vivir una experiencia inolvidable. ¿Y qué mejor que una beca Erasmus?
Desde el principio lo tuve claro; quería que mi destino fuera Bruselas. ¿Por qué? Porque es la capital europea por excelencia, está en el centro de Europa y te permite viajar barato a muchísimos sitios, es muy cosmopolita, allí nadie es extranjero, tiene un ambiente inigualable, está lleno de estudiantes universitarios (especialmente Erasmus)… y paro ya, que si no, no acabo nunca. No quería otro destino y al final, después de mucho papeleo, aquí estoy!