Normalmente los turistas suelen ir a los lugares más representativos de cada país, lo que no quiere decir que no haya otros con encanto o incluso más bonitos (¡que alguien me explique qué atracción tenemos todos por ver el Mannekin Pis de Bruselas!). Lier, a 15 km de Malinas y otros 15 de Amberes (según desde dónde midamos), es uno de esos lugares. Es pequeña, accesible, se visita en una tarde y tiene todo lo que una ciudad flamenca típica debe tener, véase su iglesia espectacular, su ayuntamiento monumental, su grote markt, sus casitas al estilo flamenco, su beguinaje o beatario y sus canales. Vamos a ello.
La grote markt (la plaza mayor para entendernos) está rodeada de los típicos edificios de estilo flamenco. La construcción que destaca es el ayuntamiento, que data de 1741 y está adosado a un campanario del año 1369. Su interior merece la pena. Nada más entrar uno se topa con una evocadora escalera de madera así como con múltitud de cuadros y lámparas de bella factura. A la izquierda del ayuntamiento está la Vleshuis o casa de los carniceros, que actualmente se utiliza para exposiciones.
Siguiendo con el recorrido, nos topamos con el monumento más representativo de la ciudad: la Zimmertoren. Este artilugio con 12 esferas periféricas es toda una obra de la relojería. Como demuestro en esta entrada que ya dediqué a la torre, se puede hablar largo y tendido sobre ella. En la misma plaza, destaca también la Gevangenenpoort, o puerta de los prisioneros, que hacía la funcion de puerta de la muralla y data del siglo XIV.
Continuando hacia el sur se llega al barrio del beguinaje. ¡Es como si hubiésemos cambiado de ciudad de repente! Muy acogedor y justo al lado de los canales.
Tras pasar al lado de la biblioteca, llegamos a la impresionante iglesia gótica-brabantina de San Gumaro o Gomarus, o Gummarus…o…bien jajaja. Se construyó en 1372 y la torre es del año 1702. ¿Los cuadros? Espectaculares. ¿Las estatuas? Espléndidas. ¿El coro? Fastuoso. ¿El púlpito? Sensacional. ¿LAS VIDRIERAS? Sólo diré que el conjunto de las vidrieras que aquí se pueden ver está catalogado como el más bello de Flandes. Aquí tuvo lugar un hecho muy unido a la historia de España, puesto que en este lugar se celebró la boda entre Juana la Loca y Felipe el Hermoso, que serían los padres de Carlos I de España.
A continuación y para terminar, os dejo con un vídeo que he hecho sobre esta joya oculta a los ojos del turista convencional.