Febrero. Mes de despedidas.
Si hay algo que caracterice este mes para los estudiantes Erasmus son las lágrimas que se resbalan por nuestras mejillas. Comienza un nuevo semestre y hay que despedirse de aquellos amigos que se habían convertido en tu familia y se marchan tras vivir contigo cinco meses.
Eso implica numerosas visitas a la estación de tren, gasto desmesurado en pañuelos de papel y, sobre todo, esperanzas de que la vida vuelva a juntaros a todos en cualquier otro lugar de nuevo.
Febrero. Mes de adrenalina.
Pero febrero también es un mes de adrenalina. Nuevos estudiantes invaden la ciudad, llegan con maletas enormes repletas de ropa, vacías de recuerdos y con las expectativas de ser llenadas de momentos y experiencias que traer a casa.
Febrero. Mes de cambios.
Para los que nos toca decir adiós a unos y recibir a los nuevos, se nos hace dura la situación, tal vez te planteas por qué solicité hacer el año entero de Erasmus, aunque por otro lado, ahora tu habitación está más amueblada que nunca al recibir toda la decoración que tus amigos, por supuesto, no se iban a llevar de vuelta a casa.
Sea como sea, febrero es un mes importante del Erasmus, para los que se van, para los que llegan y, sobre todo, para los que nos quedamos. Diría que es uno de los meses en los que esta experiencia nos hace aprender más de la vida.
Teresa Jiménez
¡Me presento! Mi nombre es Teresa Jiménez Casas (Rete para los amigos), vengo de Córdoba y soy guitarrista flamenca profesional. Estudio Administración y Dirección de Empresas y desde septiembre estoy de Erasmus en la Universidad de Gante (UGent).
Soy una persona extrovertida, espontánea y con muchísimas inquietudes. He viajado por medio mundo, he conocido a gentes de todo el planeta, y ahora que estoy en Bélgica, no espero otra cosa, sino que esta experiencia se convierta en la mejor de todas las que he vivido hasta ahora.
Estoy enamorada de la cultura, especialmente de la música. Toco la guitarra flamenca desde que tenía ocho añitos y me he subido a escenarios de España, Eslovenia, Italia y Croacia. Además, me encanta escribir. Hace unos meses terminé mi primera novela corta y tengo un sinfín de mini relatos escondidos por toda mi casa.