¡Hola a todo el mundo! Hoy os traigo un post que pretende acercar un poquito las culturas de Flandes y España ya que, durante un par de siglos estuvieron unidas bajo un mismo imperio. Si queréis descubrir que curiosidades unen a ambos en la literatura española y si queda algún monumento de esa unión, ¡acompáñame que empezamos!
Flandes y España, unidos en la memoria
Entre 1555 y 1714, los territorios actuales de Flandes y España (además de otros) fueron uno solo. Esta unión no solo sería territorial, sino que con el paso de los años ambas culturas se nutrirían una de otra. Tal es así, que actualmente podemos comprobarlo en mi propia ciudad, Amberes. ¿Sabíais que los amberinos y amberinas son apodados Sinjoren en referencia a los ‘señores’ nobles españoles que gobernaron la ciudad durante este tiempo? ¡Quien lo diría! Pese a que, por unas razones o por otras, tanto Flandes como España separaron sus caminos, pero eso no significaría que algunos lazos quedasen siempre unidos.
Los Sinjoren leen el Quijote
En Amberes, gracias a la cultura de la impresión de libros introducida por Plantin y Moretus, se imprimieron muchos clásicos de la literatura española. Obras como El Lazarillo de Tormes, la Celestina, el Orlando Furioso o Don Quijote de la Mancha fueron impresas y traducidas en Flandes. Pero no solo obras literarias, también libros de gramática, de traducción y hasta el Diccionario de Nebrija. ¿Os imagináis a los locales de la época leyendo las historias que ocurrían por España?
Don Quijote nunca llegó tan lejos
Y es que Don Quijote quizás no llegara aquí, pero puede que Cervantes sí. Cuentan que, para huir de la persecución del rey, se alistó en los tercios de Flandes. Si bien no se tiene 100% claro si el famoso escritor pisara tierras flamencas, se sospecha, ya al parecer sabía mucho de la cultura de aquí. Además, lo dejó bien claro en sus posteriores obras. En El licenciado Vidriera, el protagonista nombra las villas de Bruselas, Gante y Amberes, esta última siendo ciudad no menos para maravillar que las que había visto en Italia. En la Gitanilla, uno de los personajes tiene que despedirse de su novia para marchar a Flandes y el mismo Don Quijote de La Mancha, al referirse a Clavileño, lo compara con la figura de un tapiz flamenco, y Sancho, en la aventura de las bodas de Camacho, se refiere a la novia como chapada moza que puede pasar por los bancos de Flandes.
Una unión tan especial no podía quedar solo reflejada en palabras y por ello, la ciudad de Madrid regaló a Bruselas una estatua de Don Quijote y Sancho Panza que se colocaría, como no, en la plaza de España.
Con esto acabamos el post de hoy, espero que os haya gustado y ¡nos vemos en el próximo!
Mi nombre es Alba Aparicio, y soy la encargada de contaros todo lo relacionado con Amberes durante este segundo cuatri.
Aunque mi aventura en Flandes no empieza ahora chicos, ya han pasado 5 meses desde que mis 3 maletas y yo aterrizamos aquí. Durante este tiempo, no he parado de viajar, descubrir, probar cosas nuevas… En definitiva, empaparme de la cultura flamenca para poder contaros lo mejor posible todos los tips y secretillos de esta ciudad.
No os hacéis a la idea la cantidad de eventos y actividades que podéis hacer día a día en Amberes, es una de las ciudades más dinámicas que he conocido nunca. Si venís con expectativas de poder llegar a aburriros, lo tenéis difícil. Tanto en redes sociales como en posters por la calle, podéis encontrar un montón de eventos a los que ir y disfrutar. No os preocupéis si no dais con ellos, personalmente me dedicaré a haceros llegar esa información.