Cuando el chef Geert De Mangeleer y el sommelier Joachim Boudens crearon crearon Hertog Jan, pretendían conseguir tres estrellas Michelin en un periodo de quince años. Con uno de los equipos más jóvenes del mundo, las obtuvieron en tan solo cinco. Tras la clausura del restaurante en 2018, expandieron sus horizontes. ¿Qué estarán tramando a día de hoy?
Al cerrar las puertas de Hertog Jan*** en 2018, Geert y Joachim tenían claro que mientras una etapa terminaba, otra debía comenzar. Su visión culinaria se ampliaba hacia la creación de Hertog Jan*** Restaurant Group. Eso sí, conservando una esencia fresca, llena de pasión, energía y dedicación. Y conservando, también, su ubicación en Brujas. De este proyecto nacieron tres restaurantes de distintos conceptos:
- L.E.S.S.: Este restaurante ofrece una gastronomía menos sofisticada, aunque igualmente extraordinaria. Nace de aquellos platos que los chefs podrían servir a sus amigos en su propia casa, y sigue la premisa de «compartir es vivir». La mayoría de los platos están pensados para ocupar el centro de la mesa y ser objeto unión entre comensales. El nombre del restaurante refleja su motto: «Love, Eat, Share, Smile».
- Bar Bulot: Denominado como una brasserie a la carta. Tanto los amantes de la carne como del pescado pueden disfrutar en este local (situado, por cierto, en lo que fue el antiguo Hertog Jan***) de productos de máxima calidad, tratados con absoluto cuidado y transformados en una perfecta simplicidad.
- M O R E: Tras tan solo dos años desde que Hertog Jan*** clausuró, Geert y Joachim todavía no han tenido tiempo de abrir este tercer restaurante, pero su inauguración no debería tardar demasiado. Por ello, estaremos todos atentos.
Por si os interesa saber más sobre esta historia de excelencia culinaria, aquí os dejo un pequeño vídeo:
Flandes, a pesar de ser una región de reducido tamaño, alberga numerosas grandes figuras de la cocina y magníficos locales que ofrecen experiencias culinarias irrepetibles.
Se dice que no hay placer como el bien comer. Esto, en Flandes, jamás fue más cierto.
OS ESPERO EN EL PRÓXIMO POST: Leo Baekeland | La invención de un gantés que cambió el mundo
Os invito a este extraño lugar. Aunque las visitas no son frecuentes, haremos de esta ocasión la excepción que confirma la regla. Bienvenidos a mi cabeza.
Seguidme, os llevaré a un sitio muy especial. Normalmente, tras esta puerta pintada de colores, uno puede toparse con espaguetis flotantes, junglas de pingüinos o ciudades invisibles… A decir verdad, la mayoría de las veces, ni siquiera yo mismo estoy seguro de lo que me espera al girar el pomo. De todas formas, hoy podéis estar tranquilos. Hoy sí sé lo que hay al otro lado:
Al otro lado está Gante. Y sus calles adoquinadas, clones en bici, música abstracta, dinosaurios, idiomas alienígenas, hechizos y, dentro de esta normalidad, infinidad de locuras.
Lo más seguro es que si os dejase sueltos por este lugar, acabaríais majaras. Como no queremos eso, os lo voy a enseñar poco a poco, durante cinco meses.