Sí, sí, como lees, este museo del Jazz nunca abre.
¿Y por qué escribo sobre él os preguntaréis no?
Porque creo que es interesante, o por lo menos original…!
Comencemos por el principio, Jean-Pierre, el hombre que llevaba el negocio CIRAC, es un fanático de jazz.
Desde alrededor de 1919 esta tienda de discos Cirac ha estado situada en Diestsestraat. Es el prototipo de un asunto de familia real. Durante años lo ha llevado el negocio Jean-Pierre “Pierre” Mommens, una figura muy conocida en el mundo del jazz.
Desde 1962, lo adquirió su hija Mimi. Mimi explica que nació con el jazz en él porque su padre estuvo 100 años dedicado al jazz como hobby y profesión. Viajó numerosas veces a Nueva York o Barcelona para mantener sus contactos regulares y conoció a todas las leyendas del yaz personalmente. Después de 53 años de servicio Mimi ha decidido dejarlo.
La propiedad fue adquirida por Wim Neefs, de 40 años, de la tienda de música metal que había cerca.
Actualmente, utiliza el escaparate de su tienda de discos como museo para exponer su colección de libros, posters, revistas, clásicos y fotos firmadas por sus cantantes, desde Luis Armstrong hasta Gillesppie pasando por el padrino belga del jazz Toots Thielemans.
Esta tienda ahora está principalmente centrada en el metal y hard rock.
Definitivamente sigue vendiendo discos de jazz, pero también incluye camisetas, gorros y hasta cervezas.Es una mezcla única de muchos géneros.
Sin duda merece la pena pararse a mirar este escaparate para disfrutar de todos los éxitos que tras él aguarda.
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