Para el que no lo sepa, Malinas es una pequeña ciudad de Flandes situada entre Amberes y Lovaina, pero no debéis dejaros engañar por su tamaño, porque, y digo sinceramente, a mi me ha sorprendido muchísimo. Es una ciudad que tiene de todo, desde tradición, gastronomía, arquitectura, ¡hasta una pasarela sobre el río!
Es una visita muy recomendable para pasar un sábado. En primer lugar se puede aprovechar para hacer unas compras ya que hay gran número de tiendas (parece que la proximidad con Amberes las atrae), especialmente en la calle Bruul, que lleva a Grote Markt; además, si es sábado, habrá mercadillo en la plaza IJzerenleen.
Una vez que hemos escogido las prendas de ropa más a la moda, ya podemos ir a Grote Markt, es una de las plazas mayores más bonitas de Flandes, rodeada de las típicas casas belgas, con un precioso ayuntamiento gótico y presidiendo todo, la catedral de San Romualdo, con su gran torre, una pieza única que domina toda la ciudad desde que pasas con el tren. Subir a esta efeméride es un punto obligado, para estudiantes vale solo 3€ y los merece muchísimo, no solo puedes disfrutar de una vista sensacional de la ciudad y la región (incluso el puerto de Amberes y, si el día está claro, el Atomium de Bruselas) sino que harás un recorrido a través de uno de los mejores sistemas de campanas del mundo, con dos carillones en la misma torre.
Por supuesto, visitar el Gran Beaterio o la pasarela sobre el rio Dila es una gran elección, y donde comienza, podéis encontrar Haverwerf, palacio de congresos y exposiciones y también casa del restaurante Lamot, perfecto para tomar un café o comer. También podéis visitar la Casa de la Cultura, enfrente de la catedral.
Otro de los monumentos más recientes es el Kazerne Dossin, antigua prisión usada por los nazis en la Segunda Guerra Mundial y que desde 2010 alberga un museo sobre los Derechos Humanos y las víctimas del Holocausto.
Y para rematar, pasad por alguna tienda de chocolates, nosotros lo hemos hecho, y lo mejor que nos llevamos, la simpatía y dulzura de la dependienta, además de los pralinés.