Uno de los motivos por los que más me gusta pasear por las calles de Bruselas, es por las fachadas de los edificios. Siempre me intriga pensar cuál es su historia, para qué se levantaron, quién vive ahí y por qué… Es cierto que hay de todo, pero se repiten bastante dos tipos muy reconocibles de casas. A las primeras se les podría llamar tradicionales de estilo gremial, como las de la Grand Place (algo menos ornamentadas); las segundas son las modernistas. Aparte de Gaudí, para mí el modernismo en España se concentraba sobre todo en las estaciones de tren. Aquí, se conoce como “art Nouveau”, y sus cristaleras, barandillas de metal y motivos naturales impregnan barrios enteros de la que es la ciudad de Victor Horta.
Primeros pasos
A pesar de que el arquitecto nació en Gante y vivió en París, se instaló relativamente joven en Bruselas, y esta fue la ciudad que vio despegar su talento artístico. Como toda persona en proceso de aprender un trabajo, estuvo de aprendiz del arquitecto predilecto del rey Leopoldo II. Sus primeros proyectos se los debe a dos amigos, a los que les diseñó y construyó sus viviendas: Maison Tassel y Maison Autrique. En la Casa Tassel, la primera a su cargo, se manifiestan ya las que serán sus señas distintivas en el futuro. El hierro “decorativo”, las curvas, interiores muy luminosos, y ventanas semicirculares que sobresalen a la calle.
Nuevos proyectos
Ya más tarde, proyectó la espectacular Maison Solvay (que os habrá llamado la atención si habéis pasado por Louise) y su propio hogar. Su casa-estudio burguesa en Saint-Gilles se presenta hoy en día en forma de museo que cautiva a sus visitantes gracias a su interior. Los muebles, las claraboyas o vidrieras por donde entra la luz, las escaleras y la elección de los materiales y cómo combinan entre sí fascinan siempre a los curiosos. Eso sí, por desgracia no se permite tomar fotos de estos espacios.
Aun así, no se limitó a las viviendas particulares (ni solo a la arquitectura, ¡también fue profesor en la ULB!), son obras suyas también la Maison du Peuple, antigua sede del partido socialista; los grandes almacenes donde se aloja el Museo del Cómic; el Palacio de Bellas Artes y la estación Bruxelles Central. Incluso el pequeño “Templo de las Pasiones Humanas” en el Parque del Cincuentenario es de su autoría.
Ruta «art nouveau»
Se podría organizar una ruta a pie solo para visitar estas construcciones por fuera, y aun así costaría verlas todas. De todas formas, la solución que os ofrezco sería seleccionar vuestras favoritas (pueden ser las 4 Patrimonio de la Humanidad, u otras), y luego pasear tranquilamente por Saint-Gilles e Ixelles. Su propia casa, Tassel, Hôtel Solvay… Falta la Casa Van Eetvelde para completar el grupo reconocido como Patrimonio por la UNESCO. La última es en realidad un palacete-mansión situado en una plaza, rodeado de apacibles jardines con fuentes y lagos.
Ahora ya sabéis qué nuevo plan hacer en un día soleado, un paseo “art Nouveau” por la ciudad de Victor Horta.
¡Nos leemos pronto!
Me presento, me llamo Julio Yustas, tengo 23 años y voy a ser parte del equipo de corresponsales que, durante el próximo semestre, va a intentar que disfrutéis de Flandes al menos tanto como nosotros.
Vengo de Valencia, donde estudio el Máster de Ingeniería Industrial en la Universitat Politècnica de València. Durante los dos próximos años, disfrutaré de Bruselas gracias a un acuerdo de doble titulación por el que estudiaré el Máster en Ingeniería Electromecánica en la Université Libre de Bruxelles (ULB).
Me considero una persona bastante proactiva y es difícil que no me encontréis embarcado en alguno de mis múltiples proyectos. Mi tiempo libre lo dedico principalmente a pasar tiempo con mis amigos, viajar, la fotografía y la cocina.
