Mi nombre es Victoria, estudio periodismo en la Universitat de València y como podréis imaginar al leerme en este site: este curso no estudiaré en mi ciudad natal. Erasmusearé en Bruselas.
Y tal vez os preguntéis ¿y por qué Bruselas? Y yo me contesté a mi misma ¿y por qué no? Centro europa, diversidad cultural, riqueza lingüística, la cuna de la Unión Europea, chocolate, gofres, cerveza… Además, para que engañarnos, Bruselas suena muy cosmopolita.
Así que el día de la subasta de las plazas lo tenía muy claro: Bruselas sí o sí. Y,por suerte, así fue.
En el momento en el que te conceden una plaza erasmus empieza la carrera por encontrar el alojamiento “B”: Bueno, bonito y barato. Pero siento deciros que Bruselas no es una de esas ciudades. Nuestro concepto de “Residencia Universitaria” no es muy común por estas tierras. Sí, haberlas haylas (como las meigas) pero encontrarlas es difícil. Hay una en el centro y unas cuantas que pertenecen a la Université libre de Bruxelles. De las públicas, olvidaros por vuestra condición de erasmus, sólo podréis acceder a la residencia Irena V de la que ya os hablaré más adelante.
Descubrí esta residencia gracias a un amigo exerasmus. A principios de marzo haces la preinscripción y sobre junio la inmobiliaria se pone en contacto contigo para la elección del estudio. Son apartamentos con su baño y su cocina, con una lavandería en el mismo edificio y una sala polivalente para “nights movies”
En la tierra de Hércules Poirot lo que sí es muy común es el “kot”. Un kot es una especie de casita habilitada para estudiantes. Algunos comparten baño y cocina y otros no. Son como unas mini residencias. Hay precios de todo tipo pero si buscáis con baño y “kitchenette” privado de unos 400 euros al mes no baja.
Las tres palabras más temidas para un erasmus son “Contrato de estudios”. La convalidación de asignaturas es un mundo aparte. Todo es mucho más fácil con un coordinador amigable. Por suerte el mío lo es y no me puso demasiadas pegas con las asignaturas…bueno Diseño Gráfico e Infográfico no coló por Histoire de l’art…obviamente.
La ULB es una universidad que tiene muchos campus a lo largo y ancho de la ciudad. Mi campus es el de Solbosch que es dónde se imparten casi todas las carreras de humanidades y ciencias sociales. Tienen muy bien cuidados a sus estudiantes, por ejemplo: facilitan que el bono transporte cueste a la mitad de precio (107 euros para Bus+Tram+Metro). Lo mismito que en Valencia, vamos.
Poco a poco os iré contando como me va en esta ciudad. De momento lo único que puedo decir es que me encanta…aunque echo de menos ir de manga corta.
Victoria