El reino animal ha sido una rica fuente de inspiración para el arte desde los principios de la historia: imágenes de caballos, bisontes y mamuts llenaban las paredes de las cuevas durante la prehistoria. Y es que no hay una sola cultura en la que no encontremos representaciones de animales en forma de arte.
Los diseñadores de joyas no iban a ser menos y por eso crearon una inmensa variedad de adornos con referencias a los animales, desde pendientes hasta todo tipo de cubertería. La semana pasada visité el DIVA (museo de diamantes de Amberes) y me sorprendió la gran representación animal en las reliquias allí expuestas, diría que al menos un tercio incluían alguna alusión al mundo animal.
En este post temático os voy a presentar algunas de las joyas más relevantes del DIVA, incluyendo la simbología de cada animal, que al menos a mí, me parece muy interesante.
Broche de pavo real
El broche de pavo real data de 1867 y se atribuye al joyero parisino Gustave Baugrand. Los diamantes, zafiros, rubíes y esmeraldas engastados representan la gran variedad de colores de este animal. Las piedras preciosas provienen de una gran variedad de países: los rubíes son de Birmania, los zafiros proceden de Ceilán (Sri Lanka) y las esmeraldas de la India.
Lo que hace tan especial a este broche es que la cola del pavo real parece que tuviese vida propia. Gracias a un mecanismo de muelles y contrapesos, las plumas tiemblan ante cualquier movimiento, imitando la oscilación natural de su cola.
Los pavos reales han tenido una larga representación a lo largo de la historia. Originalmente, se asociaban a la antigua diosa griega Hera y a los dioses hindúes Murugan y Krishna. En la Edad Media, se utilizaba como símbolo de la inmortalidad, ya que se creía que la carne del pavo real no se descomponía después de la muerte. Más adelante, en el siglo XVIII, el pavo real se convirtió en el símbolo por excelencia de la belleza. Por último, a lo largo del siglo XIX se transformó en la personificación de la mujer fatal.
Si observáis la siguiente imagen, es evidente de donde viene su fama.
Brazalete de serpiente
Hecha de oro, esta pieza data de 1860, una época donde el uso de serpientes en la joyería se hizo muy popular. Sin embargo, no siempre fue así, ya que la religión ha asociado siempre las serpientes con el diablo (recordad la historia de Adán y Eva). Alrededor del siglo XVIII esta concepción empezó a cambiar y las serpientes comenzaron a ser un símbolo de amor eterno. Fue la reina Victoria en Inglaterra fue quien llevó este brazalete por primera vez, en un intento de mostrar que era inteligente como una víbora, o que al menos, aspiraba a serlo.
El cuerpo de la serpiente está fabricado mediante formas cónicas unidas, lo que le otorga una gran flexibilidad, pudiendose llevar alrededor de la muñeca o del cuello. Toda la estructura de oro está recubierta de un esmalte brillante; esto, junto a los grabados de la superficie y las piedras preciosas, dan un aspecto muy similar al de la piel de serpiente.
Copa en forma de búho
Esta copa en forma de búho es la pieza de Amberes más antigua que se conoce realizada en coco. Creada durante la edad de oro de la platería de Amberes, es una muestra clara de la riqueza de Amberes durante el desarrollo del puerto, de la influencia de la importación de productos exóticos y de la alta calidad de la artesanía en plata.
Con respecto a los orígenes, la teoría más sostenida es que esta copa está relacionada con el Gremio de Ballesteros de Amberes, ya que varias referencias bibliográficas del lugar hacen mención al búho. Data de mediados del siglo XVI y es posible que los miembros usasen copas como esta en ocasiones especiales.
Otra teoría sostiene que pertenecía a coleccionistas de objetos exóticos en las tierras alemanas y holandesas. De hecho, tiene la inscripción «Als alle fogels sin thoe neste, so is min flige beste» que significa «Si todos los pájaros durmieran en su nido, yo sería el mejor en el vuelo», frase habitual en antiguas canciones alemanas y holandesas.
La cabeza de búho de plata puede desenroscarse y verter líquido en el cuerpo del ave. El simbolismo en el caso del búho no es tan evidente como en el caso de la serpiente o el pavo real. El búho se considera habitualmente un símbolo de sabiduría, pero también puede asociarse a la avaricia, la locura o la caza. A veces incluso, tiene una cierta connotación erótica debido a su condición de ave nocturna.
OTROS
Las joyas anteriores son las más populares del museo; sin embargo, hay muchas otras que aluden al mundo animal. Os presento aquí otras dos más: el colgante de la sirena y los pendientes de colibrí.
El colgante de la sirena fue fabricado en el siglo XIX. El elemento central es una sirena, un ser mitológico muy popular tanto en la literatura, como la música. Tambien aparece una paloma, que evoca paz, esperanza y salvación. La serpiente que lleva en la mano la identifica como Equidna, un monstruo de la mitología griega.
Si nos movemos al siglo XXI, encontramos estos pendientes con forma de colibrí creados por Reema Shah. El colibrí tiene poderoso significado espiritual, ya que representa la resurrección de las almas. Se creía que cuando un alma perecía, podía tomar la forma de un colibrí para despedirse de sus seres queridos; de esta manera, llevar estos pendientes puede representar llevar a un ser querido consigo.
Esto es todo por este post, espero que os haya gustado. ¡Nos vemos en el siguiente!
Soy Soledad Mínguez y vengo de un pequeño pueblo en Castilla La Mancha, aunque he estudiado en Valencia; una ciudad bastante acogedora, verde y bonita, por cierto. Actualmente, me encuentro cursando mi último año de Máster en Ingeniería Aeronáutica de la Universitat Politècnica de València y gracias al programa Erasmus puedo disfrutar de este año en Bruselas.
Bruselas goza de una mala fama inmerecida: es aclamada por muchos turistas como ciudad sucia, fea, con poca vida nocturna y escasa oferta cultural. Llevo en la ciudad ya cinco meses y estoy aquí para demostraros lo contrario, es un lugar que tiene mucho que ofrecer. Pero no sólo hablaremos aquí sobre Bruselas, sino de toda la región de Flandes.
Durante los próximos meses compartiré con vosotros todas mis aventuras y aquellas cositas que he ido descubriendo. Mi principal objetivo es transportaros a la cultura flamenca, y ojalá, animaros a visitar esta maravillosa región. Juntos descubriremos la gastronomía típica de la región de Flandes, os conseguiré los mejores truquitos y compartiré las recetas, para que vosotros también podáis degustarlas aun estando tan lejos. ¡Pero no todo queda ahí!, también conoceremos a artistas y estilistas belgas, adentrándonos en el mundo de la moda flamenca y su historia.