¡Buenas tardes a todos! Entramos ya en la segunda quincena de noviembre y las calles, aparentemente de todas las ciudades del mundo, están repletas de luces y ambiente navideño. Es pronto y normal a partes iguales, porque claro, este año los comercios tendrán que empezar a funcionar lo antes posible. Hago una llamada al 2020: Querido amigo, no queremos más sorpresas, ahora solo te pedimos de las que vienen en papel rojo perfumado o envoltorios de turrones con almendras.
Dicho esto, y en vista de que tendremos que esperar un poquito para conocer las medidas que se tomarán en un mes, hoy os traigo un resumen de toda la normativa vigente en Bélgica. ¿Qué puedo hacer y qué no? ¿Podré viajar un poquito antes para visitar a mi familia por Navidad? ¿Puedo comprar regalos en algún sitio? ¿Y enviarlos? Preguntas sin respuesta, pero con grandes suposiciones.
Ahí va la ley, cuidado que corre
- Las normas generales para vivir en Bélgica en tiempos de coronavirus apuntan que en ninguno de los casos se puede salir a las calles en grupos superiores a cuatro personas, y en la gran mayoría de los espacios céntricos o turísticos es OBLIGATORIO llevar la mascarillas, incluso si vamos solos por la calle. (En grupo, comprendido de 2 a 4 personas no está permitido caminar sin mascarilla) Podemos evitar las distancias de seguridad, por supuesto, en nuestros lugares de residencia con nuestros contactos más cercanos, y podremos invitar solo y exclusivamente a una persona más; lo que en Bélgica han querido llamar El compañero de mimos. Es una iniciativa promovida por psicólogos y especialmente dirigida a las personas que viven solas, está demostrado que el ser humano tiene la necesidad de socializar y recibir cariño. Así que sed muy astutos con quien elegís.
- Terminantemente prohibido quitarse la mascarilla en espacios públicos y cerrados, además de que tenéis que guardar siempre, en la medida de lo posible, las distancias de seguridad. Ahora lo tenéis fácil, porque solo están abiertos los supermercados; pero cuidado aquí que generalmente hay colas para entrar porque todos tienen límite de aforo (Que suele ser el número de carros que pueden entrar en el establecimiento) Así que id con tiempo a hacer las correspondientes compras
- Ligado un poco a los comercios, hablaremos de los no esenciales: A día de hoy siguen cerrados, aunque la gran mayoría permiten la compra online (Muchos incluso envíos gratuitos) y recibos en residencia que cumplen con todas las medidas de seguridad, lo que quiere decir que si vives en un piso el repartido no va a entrar en el bloque, sino que dejará tu paquete a la puerta y te avisará para que bajes a recogerlo con mascarilla y desinfectado. Y aquí os traigo un halo esperanzador; todas las predicciones apuntan a que durante la época de navidades volverán a abrir cumpliendo con la limpieza y reglas adecuadas.
- Y aquí viene lo que más os suele interesar, los viajes. Para empezar os dejo por aquí el link a la página del gobierno donde podréis cercioraros de los colores de los países de procedencia y destino. La verdad es bastante deprimente porque toda Europa es roja ahora mismo exceptuando algunos puntos nórdicos. Aún así, en este confinamiento están permitidos los traslados, el gobierno recomienda encarecidamente evitarlos si no es de extrema necesidad o un viaje esencial (Por motivos de trabajo, por ejemplo). Es obligatorio completar el Passenger Locator Form al que también os dejo acceso en este link y guardar 10 días de cuarentena si llegáis al país desde otro (Que esté en color rojo) de procedencia. Os voy a dejar aquí otro link más (Soy una plasta, lo sé) con mi antiguo post en el que viene información muy relevante sobre el tema de los test PCR.
¡Nos vemos pronto compañeros! Espero que haya sido muy útil.
Mi nombre es Eva Herrero y soy la nueva corresponsal Erasmus para las ciudades de Amberes y Lovaina. ¡Estudio cuarto de Publicidad y Relaciones Públicas en la Universidad de Salamanca y estoy muy contenta de poder compartir de hoy en adelante todas mis experiencias con vosotros!
Solo llevo aquí un día, pero me ha bastado para comprender que Bélgica es el país de las bicicletas, la ciudad está repleta de ciclistas y las calles están perfectamente acondicionadas, aunque el caos entre transeúntes a veces resulte inevitable.