¿Qué hacer si tenemos un día libre para pasarlo en Gante?
Con sólo unas horas en esta ciudad, la capital del Flandes oriental, nos podremos transportar a una época medieval, comerciante, humanista y moderna. ¿Cómo llegar desde Lovaina? En tren, a poco más de una hora, pasando por Bruselas. ¿Dónde encontrar las mejores opciones para viajar? Aquí.
Tras llegar a su estación de tren, de estilo decimonónico y contemporáneo, tendremos que caminar unos 500 metros hasta encontrar nuestra primera parada de nuestra visita exprés (primera parada del post, pero si estamos allí será imposible no pararnos a cada paso con la cantidad de lugares interesantes y hermosos que encontraremos):
1. Complejo de Saint Pieters
Podremos encontrarlo aquí, con su plaza, Iglesia y Abadía. Este conjunto de edificios históricos recorren más de mil años de arte y arquitectura europeas. La primitiva abadía fue fundada en el siglo VII, de la cual se conservan restos en la parte posterior. Tras numerosas ampliaciones y reconstrucciones en nuestros días podemos disfrutar de su claustro, refectorio, palacio e iglesia barroca. La iglesia es una obra maestra de este estilo artístico, y desde dentro se puede ver la cúpula de 57 metros de altura y su púlpito barroco también, datando de mediados del siglo XVII.
Iglesia de Saint Pieters
2. Explanada de Sint Baafsplein
Continuando desde Saint Pieters hacia el norte, bordeando los canales, llegaremos a esta gran explanada repleta de edificios históricos y con gran importancia, como la catedral de San Babón, la iglesia de San Nicolás o el campanario municipal (Belfort). Desde lejos ya se pueden ver sus altas torres, primero San Babón, la catedral de Gante. Llama la atención además de su altísima torre-campanario (97 metros), su cripta y las numerosas obras de arte que se hallan en sus capillas. Avanzando un poco más nos encontramos con el Belford de la ciudad, su campanario, símbolo de su riqueza y poder municipal al competir en altura con las torres de las iglesias . En él se almacenaban documentos y se realizaban labores administrativas. Por último, la iglesia de San Nicolás nos da la oportunidad para hacer una de las fotos más conocidas en Gante. Su perfil esbelto y el parque delante conforman un conjunto fantástico ¡No os perdáis nada!
Belfort
San Babón
San Nicolás
3. Ayuntamiento
Gante es otra de esas ciudades con impresionantes ayuntamientos góticos, como Bruselas o nuestra Lovaina, con sus fachadas floridas, hornacinas, estatuas y pináculos. Su interior es visitable y esconde muchas historias, pero es recomendable ir con tiempo a verlo. Su torre, con las banderas europea, belga, flamenca y de Gante, es custodiada por una solemne (y seria) estatua de un hombre con atributos de emperador (orbe, corona imperial y espada), y que forzó la transformación de la preciosa segunda ciudad más poblada y rica del norte de los Alpes, en una preciosa ciudad. Si queréis (debéis) conocer su historia, visitad el ayuntamiento, os sonará.
Stadhuis, o Ayuntamiento
4. Het Gravensteen
Llegando al final de nuestra fugaz visita a Gante, toca pasar por el castillo situado en el centro de la ciudad, por mandato del conde de la ciudad, Balduino “Brazo de hierro”, en el siglo IX. Tras ampliaciones y restauraciones desde el siglo XII, fue finalmente reparado y acondicionado en 1889. Es una gigantesca mole de piedra caliza, con torreones, baluartes, capilla, mazmorras y todo lo que se puede esperar de un castillo en el que sentirnos caballeros por un rato. Es visitable por dentro de 9 a 16h, por 6€ con tarifa de estudiante. En estos días alberga una exposición de instrumentos de tortura, que probablemente fueron usados en la plaza adyacente, donde se realizaban las ejecuciones públicas, y que ahora tiene un cometido mucho más alegre.
Castillo
Una curiosidad sobre el castillo, es que sólo fue conquistado una vez. Durante menos de un día. Fue ocupado por los estudiantes de la ciudad al subir los precios de la cerveza, y fue desalojado por los bomberos a manguerazos, pero se consiguió una bajada de precios gracias a esa manifestación. ¡Hurra!
Con la visita al castillo damos por terminada nuestra siempre demasiado corta visita, esta vez a Gante, la ciudad que hará que queráis volver lo antes posible. Aún queda muchísimo por hacer y ver allí, ¡así que preparaos! Más Gante y viajes en… #ErasmusLovaina
