Ya os he hablado un poquito de la Biblioteca Central de la Universidad de Lovaina, uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad y de su famoso carrillón que da sus conciertos todos los jueves. En estas fechas tan señaladas (estamos en plenos exámenes) adquiere una importancia especial para todos los estudiantes que la llenan para estudiar. Por eso os voy a hablar un poco de ella.
La Biblioteca principal de la Universidad no estuvo siempre donde está ahora, en la plaza Monseigneur Ladeuzeplein. Antes se encontraba en la calle Naamsestraat, pero durante la I Guerra Mundial fue totalmente destruida por el ejército alemán, ante la indignación del mundo entero. Fue así reconstruida tras la guerra, principalmente con capital estadounidense. Por ello a lo largo y ancho de la fachada hay referencias a la ayuda norteamericana (con placas alusivas a las diferentes universidades que apoyaron el proyecto), al patriotismo belga y a la victoria de los Aliados (por ejemplo, una Madonna con casco atravesando con su espada la cabeza del águila prusiana). La reconstrucción se hizo siguiendo el estilo tradicional renacentista flamenco, por lo que da la impresión de que sea más antigua de lo que en realidad es. Después, durante la II Guerra Mundial volvió a ser incendiada, pero en esta ocasión se pudo reconstruir sin mayores cambios (y teniendo buen cuidado de construir con materiales ignífugos esta vez).
El interior es tan llamativo como el exterior. Tras unos grandes soportales de acceso se entra y encuentras una gran sala de estudio toda recubierta de madera. Tiene dos pisos unidos por una escalera de caracol. La verdad es que es un lugar encantador incluso para ir a estudiar. En ella tienes la sensación de estar en un lugar donde el conocimiento es lo importante. La construcción en madera, las filas de colecciones de libros y la luz que entra por los grandes ventanales crean un ambiente muy acogedor y como de otro tiempo. Merece la pena visitarla aunque sea solamente para verla. Una gran chimenea en un extremo y las filas de mesas le dan un aire muy grato para pasar las horas que estos días se necesitan para preparar los exámenes.
Además de esta gran biblioteca la Universidad cuenta en cada facultad con la suya propia. En esta página, puedes encontrar los horarios de todas las bibliotecas y su ocupación, cosa muy útil ahora en época de exámenes para poder saber desde tu casa donde tienes sitio.
A mi particularmente me gusta el interior de las bibliotecas, su tranquilidad. En estas fechas y con tanta gente en ella esta paz se ve un poco perturbada, pero así y todo sigue siendo uno de mis lugares favoritos de la ciudad, por fuera y por dentro. Me gusta pasear por la enorme plaza donde se encuentra para después sumergirme dentro sintiendo que estoy en otra época, hace muchos, muchos años.
