Dag!
Parece mentira, pero llevo en Lovaina justo 3 semanas. Sé que no es mucho, pero no parece que haya pasado tanto tiempo… En estas 3 semanas he podido conocer algunos rincones (espectaculares) de la ciudad, algunos de los cuales he compartido con vosotras y vosotros en el blog. Sin embargo, hasta ahora no había hecho ninguna excursión importante a otra parte de la región. ¡Ya tocaba! El primero de los muchos destinos flamencos que visitaré ha sido Antwerpen.
Amberes, nombre con que se conoce la ciudad en castellano, es la capital de la provincia homónima, una de las cinco provincias de la región de Flandes. Está situada al norte de Bélgica, cerca de la frontera con los Países Bajos.
Pero tranquilas, tranquilos: no voy a daros más detalles sobre su población y su extensión… Dejando de lado esta pequeña introducción geográfica, hoy vengo a hablaros de algunos de los lugares que recomiendo que visitéis de Amberes.
Uno de los más famosos es la Grote Markt de Antwerpen. Aunque la plaza del “Gran Mercado” se encuentra en la mayoría de ciudades flamencas, incluida Lovaina, cada una de ellas tiene sus peculiaridades. En el caso de Amberes, se trata de uno de los puntos neurálgicos del centro de la ciudad, y podréis encontrar multitud de bares y restaurantes alrededor de ella, así como en las calles próximas. Una gran estatua adorna el centro de la plaza, envuelta de edificios preciosos, entre los cuales destaca el ayuntamiento. No obstante, si la visitáis en los próximos meses, sólo podréis ver una lona que cubre la fachada: el edificio está actualmente en obras, como sucede con otros monumentos de la ciudad.
Desde la Grote Markt podréis observar otra de las maravillas de Amberes: la Catedral. Con una torre impresionante, la catedral luce un brillo impoluto durante las horas de luz. A sus pies, una escultura, que hace referencia a un cuento ambientado en la ciudad sobre un niño y su perro. Si queréis saber qué pasa con ambos personajes, debéis visitar Amberes.
Otro de los atractivos de la ciudad es el conjunto de callejuelas pintorescas que envuelven el centro histórico amberino. El ambiente otoñal, con las primeras hojas que caen, enrojecidas, de los árboles las inunda y, llenas de comercios y de gente, las calles siguen muy vivas en estos primeros días de octubre. ¡Y estoy bien seguro de que seguirán así en cualquier época! Una de ellas es la Vlaaikensgang. ¿Qué tiene de especial esta calle? Es una de las más estrechas de la ciudad, os recomiendo que paseéis por ella y disfrutéis de sus colores.
Si no tienes suficiente con ver la ciudad a ras de suelo, siempre puedes dirigirte al Museum aan de Stroom (MAS). Además de ser uno de los museos de arte más importantes de Amberes, dispone de una terraza desde la que podrás contemplar la ciudad en 360º. La entrada al museo es de pago, pero la terraza es accesible de manera gratuita. No sólo las guías turísticas hablan de ella, sino que muchas personas locales también la recomiendan. ¡Así que ni os lo penséis!
Y, cómo no, Amberes también está llena de comida y bebida. Podéis acompañar vuestra visita, estéis en el centro de la ciudad o paseando junto al río, con un gofre o unas patatas fritas. Además, los sábados se celebran en la ciudad unos mercadillos en los que podréis encontrar comida de todos tipos: desde platos asiáticos hasta queso y jamón (y muchas, muchísimas, aceitunas).
Podéis visitar la ciudad en un día, pero os recomiendo que le dediquéis otro más, especialmente si os interesa el arte: el museo de la casa de Rubens (Rubenshuis), uno de los pintores más importantes de la historia del arte, se encuentra en Antwerpen. Más adelante podréis encontrar en el blog un post específico sobre este museo.
Hay pinturas de este artista en varias iglesias de la ciudad, entre las cuales se encuentra San Pablo. De su exterior llama la atención su estilo mixto entre el gótico y el barroco. Dentro de ella podremos observar una obra de arte diseñada a finales del siglo XVII: el Calvario. Se trata de un conjunto de estatuas y esculturas que representan el calvario de Jesús. Personalmente me produjo una sensación extraña, tal y como podéis ver en la foto que me hizo Maria Antònia… ¿Por qué no os acercáis a la iglesia y lo visitáis vosotras y vosotros mismos?
Probablemente, la ciudad os dará la bienvenida y os despedirá de la mejor manera: si vais en tren, la Estación Central de Amberes, de una belleza espectacular, será lo último que veréis de este maravilloso lugar. Os recomiendo que utilicéis este transporte, puesto que Bélgica se caracteriza por tener una amplia red ferroviaria y podreís llegar a Antwerpen prácticamente desde cualquier gran ciudad flamenca en un tiempo no superior a una hora y media en el peor de los casos.
Si visitáis Amberes, espero que este post os pueda servir de ayuda e inspiración. Si ya la habéis visitado, os invito a que comentéis otros lugares de la ciudad que no haya mencionado y que creáis que valga la pena descubrir.
Un saludo,
Alejandro
Me llamo Alejandro Caravaca Hernández, y seré el corresponsal de Turismo en Flandes y Bruselas en Lovaina durante el primer semestre del curso 2018/2019. Ya me iréis conociendo poco a poco (nos esperan 5 meses por delante) pero, a modo de presentación, os explicaré brevemente quién soy y qué espero de mi experiencia en Lovaina.
Nací en noviembre del 1997, hace poco menos de 21 años, y vivo en Montcada i Reixac, un municipio de la periferia de Barcelona. Estoy estudiando 4º de Pedagogía (por si alguien se lo estaba preguntando, no es lo mismo que podología ni que logopedia) en la Universitat Autònoma de Barcelona, una de las universidades públicas catalanas. Me considero una persona activa y sociable, y participo en iniciativas socioculturales del municipio donde vivo, además de ser representante estudiantil en mi facultad. Entre mis hobbies destacaría el teatro: formo parte de un grupo de teatro amateur en Montcada i Reixac. De hecho, hace unos meses estrenamos un musical basado en la película Moulin Rouge, en el que pude interpretar el papel del antagonista, “el Duque”.